De cómo me enamoré de Hive y otras confesiones [Esp/Eng]

A veces uno anda por el mundo sin destino seguro, sin lugar fijo, y no lo sabe, solo se da cuenta cuando llega a sitios como este. Al tropezarme con las autopistas digitales que nos ofrece HIVE, reconocí que siempre había pertenecido aquí, y ante tal afirmación, sé que se preguntarán de dónde me viene tal certeza.

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Estoy aprovechando la oportunidad de reflexión que nos ofrece @maylink desde su otra orilla, al visualizar los logros en HIVE.

De la mano de dos amigas, di mis primeros pasos: tímidos pasos, como los de quien no se reconoce y teme un mundo completamente diferente. Fueron mis primeros ángeles: @yuraimatc y @marpasifico. Ellas me agarraron fuerte mientras yo intentaba cruzar el umbral de esta blockchain. Después vinieron otros, y otros más, que no dudaron en abrirme puertas, que no temieron auxiliarme al descifrar códigos que, sin ayuda, no hubiera podido siquiera imaginar.

Quizás advierten que soy un tanto audaz al hablar tan apasionadamente cuando apenas hace tres meses elegí mi nombre de usuario para abrir mi cuenta en HIVE, pero no puedo evitar la intensidad cuando las cosas me tocan fibras tan profundas.

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Y ahora vienen algunas confesiones: tuve mi recelo al llegar, porque lo novedoso siempre te hace fruncir el entrecejo cuando se combina con desconocimiento. Quizás fue la parte económica, con las recompensas que a la larga se prometían, la que me hizo perder el miedo. Lo admito: no estoy muy orgullosa de ello, cuando después de tres meses encuentro que más que el sonido de las monedas en el bolsillo, lo que me hace soñar en esta red es la ilusión con que cada mañana despierto. Aquí, cada palabra, cada imagen y cada interacción con otros hivers me hace vibrar de una manera aún más auténtica, algo que ya había probado en otras plataformas y no había conseguido.

Desde que llegué a HIVE, mi creación va más allá de lo puramente digital y ha comenzado a parecerse a un viaje espiritual. Creo, y no miento, que hoy me conozco más mientras comparto mis ideas y canalizo mi energía de tantas maneras que antes no creía posibles.

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Este ecosistema ha permitido que lo que mis palabras transmiten no se ahogue en algoritmos diseñados arbitrariamente para intereses que me son diametralmente opuestos. Ahora me siento fluir de manera más orgánica y, sobre todo, más transparente.

Mi pequeña hija, que también es mi confidente, mi cómplice y mi escudera, dice que HIVE le está robando el amor que siento por ella. Yo me río de sus ocurrencias y, a la vez, pienso: ¿si no tendrá ella algo de razón? ¿Me estaré enamorando de HIVE? No se rían, amigos míos, que amar a estas alturas, cuando el mundo parece no importarle las pasiones ni lo genuino de los sentimientos, es realmente una fortuna.

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No imaginan lo que cada voto, cada comentario o cada nuevo seguidor significa para esta mujer, que siente las recompensas como un espejo de lo que doy.

Cuando comencé a leer y a estudiar estos nuevos caminos, una palabra aparecía una y otra vez: descentralización y las explicaciones encontradas nunca fueron tan reveladoras como lo que he comprendido al cabo de semanas de publicar diariamente y compartir este viaje de abundancia y propósitos con muchos amigos ganados en estas lides. La descentralización es el arma que se nos otorga, el bono de victoria con que damos poder a nuestras voces y la certeza de que cada aporte que hagamos siembra algo aún más grande.

Y, en efecto, le doy la razón a mi niña: me estoy enamorando de este rincón de sueños llamado HIVE, y de alguna forma le inculco ese sentimiento a ella. Es que es tan difícil encontrar lugares donde nuestras voces sean escuchadas y valoradas, que valen la pena amores así.

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Invito a esos ángeles que mencionaba al inicio, @yuraimatc y @marpasifico, a compartirnos sus logros, sus esperanzas y sus sueños por acá.

Para esta comunidad naciente y bella, #greenzone, una parte de las recompensas de este post.

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_{✳️¡𝑮𝒓𝒂𝒄𝒊𝒂𝒔 𝒑𝒐𝒓 𝒍𝒆𝒆𝒓! ✳️
𝑺𝒊 𝒂ú𝒏 𝒏𝒐 𝒎𝒆 𝒄𝒐𝒏𝒐𝒄𝒆𝒔: 𝒔𝒐𝒚 𝒏𝒆𝒖𝒓ó𝒍𝒐𝒈𝒂 𝒚 𝒆𝒔𝒄𝒓𝒊𝒕𝒐𝒓𝒂 𝒄𝒖𝒃𝒂𝒏𝒂, 𝒎𝒂𝒅𝒓𝒆, 𝒎𝒖𝒋𝒆𝒓 𝒚 𝒔𝒐ñ𝒂𝒅𝒐𝒓𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒆𝒏𝒄𝒐𝒏𝒕𝒓ó 𝒆𝒏 𝑯𝒊𝒗𝒆 𝒖𝒏 𝒉𝒆𝒓𝒎𝒐𝒔𝒐 𝒆𝒔𝒑𝒂𝒄𝒊𝒐 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒗𝒐𝒍𝒂𝒓.
𝑬𝒍 𝒕𝒆𝒙𝒕𝒐 𝒚 𝒍𝒂𝒔 𝒊𝒎á𝒈𝒆𝒏𝒆𝒔 𝒔𝒐𝒏 𝒅𝒆 𝒎𝒊 𝒂𝒖𝒕𝒐𝒓í𝒂, 100% 𝒉𝒖𝒎𝒂𝒏𝒐𝒔 (𝒔𝒊𝒏 𝑰𝑨).
𝑩𝒂𝒏𝒏𝒆𝒓 𝒅𝒊𝒔𝒆ñ𝒂𝒅𝒐 𝒑𝒐𝒓 𝑳𝒖𝒎𝒊𝒊.
¿𝑻𝒆 𝒈𝒖𝒔𝒕ó 𝒆𝒔𝒕𝒂 𝒑𝒖𝒃𝒍𝒊𝒄𝒂𝒄𝒊ó𝒏? 𝑽𝒐𝒕𝒂, 𝒄𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕𝒂 𝒐 𝒓𝒆𝒃𝒍𝒐𝒈𝒖𝒆𝒂 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒂𝒚𝒖𝒅𝒂𝒓 𝒂 𝒅𝒆𝒔𝒑𝒍𝒆𝒈𝒂𝒓 𝒆𝒔𝒕𝒂𝒔 𝒂𝒍𝒂𝒔.💚}

ENGLISH VERSION

How I Fell in Love with Hive and Other Confessions

Sometimes one wanders the world with no sure destination, no fixed place, and doesn’t even realize it, you only notice when you arrive at places like this. Stumbling upon the digital highways that HIVE offers, I realized I had always belonged here, and with that affirmation, I know you might wonder where such certainty comes from.

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I’m taking advantage of the opportunity for reflection that @maylink offers from their other shore, while reflecting on the achievements within HIVE.

With the help of two friends, I took my first steps: timid steps, like those of someone who doesn’t recognize themselves and fears a completely different world. They were my first angels: @yuraimatc and @marpasifico. They held me tight as I tried to cross the threshold of this blockchain. Then came others, and more, who didn’t hesitate to open doors for me, who weren’t afraid to help me decipher codes that, without assistance, I wouldn’t have even been able to imagine.

Perhaps and I warn you, I’m being a bit bold by speaking so passionately when it’s only been three months since I chose my username to open my account on HIVE, but I can’t help the intensity when things touch me on such a deep level.

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And now, some confessions: I was wary when I first arrived because novelty always makes you frown when mixed with ignorance. Maybe it was the economic aspect, the long-term rewards, that made me lose my fear. I admit it that I’m not very proud of that, especially now, three months later, when I find that what makes me dream in this network isn’t the sound of coins in my pocket but the excitement I feel every morning when I wake up. Here, every word, every image, and every interaction with other hivers makes me vibrate in a more authentic way, something I had tried on other platforms but never achieved.

Since arriving on HIVE, my creativity has gone beyond the purely digital and has begun to resemble a spiritual journey. I believe and I’m not lying, that I now know myself better as I share my ideas and channel my energy in ways I never thought possible before.

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This ecosystem has allowed what my words convey not to drown in algorithms arbitrarily designed for interests diametrically opposed to mine. Now, I feel myself flowing more organically and, above all, more transparently.

My little daughter, who is also my confidant, my accomplice, and my shield-bearer, says HIVE is stealing the love I feel for her. I laugh at her whims, but at the same time, I wonder: Could she be right? Am I falling in love with HIVE? Don’t laugh, my friends, because loving at this point, when the world seems indifferent to passions and the genuineness of feelings, is truly a blessing.

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You can’t imagine what every vote, every comment, or every new follower means to this woman, who sees rewards as a reflection of what she gives.

When I started reading and studying these new paths, one word kept appearing over and over: decentralization and the explanations I found were never as revealing as what I’ve come to understand after weeks of daily posting and sharing this journey of abundance and purpose with many friends I’ve made along the way. Decentralization is the weapon we’ve been given, the victory bonus that empowers our voices and the certainty that every contribution we make plants the seed of something even greater.

And yes, I admit my little girl is right: I’m falling in love with this corner of dreams called HIVE, and in some way, I’m passing that feeling on to her. It’s just so hard to find places where our voices are heard and valued, that’s why loves like this are worth it.

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I invite those angels I mentioned at the beginning, @yuraimatc and @marpasifico, to share their achievements, hopes, and dreams here.

For this nascent and beautiful community, #greenzone, a portion of this post’s rewards.

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_{✳️𝑻𝒉𝒂𝒏𝒌𝒔 𝒇𝒐𝒓 𝒓𝒆𝒂𝒅𝒊𝒏𝒈! ✳️
𝑰𝒇 𝒚𝒐𝒖 𝒅𝒐𝒏’𝒕 𝒌𝒏𝒐𝒘 𝒎𝒆 𝒚𝒆𝒕. 𝑰’𝒎 𝒂 𝑪𝒖𝒃𝒂𝒏 𝒏𝒆𝒖𝒓𝒐𝒍𝒐𝒈𝒊𝒔𝒕 𝒂𝒏𝒅 𝒘𝒓𝒊𝒕𝒆𝒓, 𝒂 𝒎𝒐𝒕𝒉𝒆𝒓, 𝒂 𝒘𝒐𝒎𝒂𝒏, 𝒂𝒏𝒅 𝒂 𝒅𝒓𝒆𝒂𝒎𝒆𝒓 𝒘𝒉𝒐’𝒔 𝒇𝒐𝒖𝒏𝒅 𝒊𝒏 𝑯𝒊𝒗𝒆 𝒂 𝒃𝒆𝒂𝒖𝒕𝒊𝒇𝒖𝒍 𝒔𝒑𝒂𝒄𝒆 𝒕𝒐 𝒔𝒐𝒂𝒓.
𝑨𝒍𝒍 𝒕𝒆𝒙𝒕 𝒂𝒏𝒅 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒆𝒔 𝒂𝒓𝒆 𝒎𝒚 𝒐𝒓𝒊𝒈𝒊𝒏𝒂𝒍 𝒄𝒓𝒆𝒂𝒕𝒊𝒐𝒏𝒔, 100% 𝒉𝒖𝒎𝒂𝒏-𝒎𝒂𝒅𝒆 (𝒏𝒐 𝑨𝑰).
𝑩𝒂𝒏𝒏𝒆𝒓 𝒅𝒆𝒔𝒊𝒈𝒏𝒆𝒅 𝒃𝒚 𝑳𝒖𝒎𝒊𝒊.
𝑳𝒐𝒗𝒆𝒅 𝒕𝒉𝒊𝒔 𝒑𝒐𝒔𝒕? 𝑼𝒑𝒗𝒐𝒕𝒆, 𝒄𝒐𝒎𝒎𝒆𝒏𝒕, 𝒐𝒓 𝒓𝒆𝒃𝒍𝒐𝒈 𝒕𝒐 𝒔𝒑𝒓𝒆𝒂𝒅 𝒕𝒉𝒆 𝒘𝒊𝒏𝒈𝒔 𝒐𝒇 𝒄𝒓𝒆𝒂𝒕𝒊𝒗𝒊𝒕𝒚! 💚}