[ENG/ESP] Prioritizing Customer Preferences. || Priorizar las preferencias de los clientes.

As entrepreneurs, prioritizing our clients' preferences is fundamental to cultivating authenticity and trust. A deep understanding and respect for what our clients want not only strengthens our relationship but also establishes our reliability in their eyes. However, the nature of client preferences can sometimes pose challenges. What happens when a client changes their mind midway through the creation of an order, or when we can't obtain precise measurements because the orders are surprise packages?

This scenario is prevalent among entrepreneurs who specialize in custom orders, where true satisfaction lies in crafting an item that fits impeccably. No doubt, there is joy in delivering a perfect product even with limited contact or zero measurements but this isn't always the case.

There are occasions when despite our best efforts, the final product may not align perfectly with the client's expectations or fit as intended. I recently encountered such a situation with a client. Rather than react with frustration or cast blames, I chose a different approach. Here's a little back story and how I handled the situation.

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A client recently reached out to me with a request for a custom crochet beanie as a surprise gift for his partner. During our discussion, I asked for his partner's head measurement but he mentioned it was meant to be a surprise. I explained to him that I would use a standard female head size and he agreed.

A few days later, I delivered the package to his partner and she immediately loved the colours and texture of the beanie. I also made sure to mention that my contact details were on the cloth tag, in case she ever wanted another crochet item.

The next day, I received a message from her saying that the beanie was about two to three inches too wide for her head. While this was disappointing, especially because her initial delight was dampened and I had to frog (undo) hours of work just to remake the beanie, I chose not to place any blame on the client or let frustration take over.

Instead, I viewed this as an opportunity to improve my skills and build trust. I arranged a meeting with her, took the accurate measurements in person and got to work immediately. Although frogging and recreating the beanie was not so delightful, the experience was
completely worth it. When I delivered the revised beanie, she couldn't stop thanking me and that appreciation made all the effort truly rewarding.

Not only did this experience result in genuine client satisfaction and happiness, but it also significantly enhanced the reputation and image of. my brand. By demonstrating patience, professionalism and commitment to delivering quality even when faced with a setback, I was able to reinforce the trust the client had in my craftsmanship.

Facing challenges is an integral part of being an entrepreneur.
Things may not always go as planned but our ability to handle challenges with prowess and intelligence would always make the difference.

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^{images belong to me, except stated otherwise. Translated with DeepL.}

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LIEBE🤍

![LEER EN ESPANOL]

Como empresarios, dar prioridad a las preferencias de nuestros clientes es fundamental para cultivar la autenticidad y la confianza. Un profundo conocimiento y respeto de lo que quieren nuestros clientes no solo fortalece nuestra relación, sino que también establece nuestra fiabilidad a sus ojos. Sin embargo, la naturaleza de las preferencias de los clientes a veces puede plantear problemas. ¿Qué ocurre cuando un cliente cambia de opinión a mitad de la creación de un pedido, o cuando no podemos obtener medidas precisas porque los pedidos son paquetes sorpresa?

Esta situación es frecuente entre los empresarios especializados en pedidos a medida, donde la verdadera satisfacción reside en crear un artículo que se ajuste impecablemente. No cabe duda de que es un placer entregar un producto perfecto incluso con un contacto limitado o sin tomar medidas, pero no siempre es así.

Hay ocasiones en las que, a pesar de nuestros esfuerzos, el producto final puede no ajustarse perfectamente a las expectativas del cliente o no quedarle como estaba previsto. Hace poco me encontré con una situación así con un cliente. En lugar de reaccionar con frustración o echar culpas, opté por un enfoque diferente. He aquí la historia y cómo resolví la situación.

Hace poco, un cliente me pidió un gorro de ganchillo personalizado como regalo sorpresa para su pareja. Durante la conversación, le pedí la medida de la cabeza de su pareja, pero me dijo que era una sorpresa. Le expliqué que utilizaría una medida estándar de cabeza femenina y estuvo de acuerdo.

Unos días después, le entregué el paquete a su pareja y enseguida le encantaron los colores y la textura del gorro. También me aseguré de mencionar que mis datos de contacto estaban en la etiqueta de tela, por si alguna vez quería otro artículo de ganchillo.

Al día siguiente, recibí un mensaje suyo diciendo que el gorro era unos cinco o seis centímetros demasiado ancho para su cabeza. Aunque fue decepcionante, sobre todo porque su alegría inicial se vio empañada y tuve que deshacer horas de trabajo para rehacer el gorro, decidí no culpar a la clienta ni dejar que la frustración se apoderara de mí.

En lugar de eso, lo vi como una oportunidad para mejorar mis habilidades y generar confianza. Concerté una cita con ella, tomé las medidas exactas en persona y me puse manos a la obra de inmediato. A pesar de que no fue tan agradable hacer y rehacer el gorro, la experiencia mereció completamente la pena: Cuando le entregué el gorrito revisado, no podía dejar de agradecérmelo y ese agradecimiento hizo que todo el esfuerzo fuera realmente gratificante.

Esta experiencia no solo se tradujo en una auténtica satisfacción y felicidad del cliente, sino que también mejoró significativamente la reputación y la imagen de mi marca. Demostrando paciencia, profesionalidad y compromiso con la calidad incluso ante un contratiempo, pude reforzar la confianza del cliente en mi trabajo.

Enfrentarse a los retos es parte integrante de ser empresario.
Puede que las cosas no siempre salgan según lo previsto, pero nuestra capacidad para afrontar los retos con destreza e inteligencia siempre marcará la diferencia.

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^{las imágenes me pertenecen, salvo que se indique lo contrario. Traducido con DeepL.}

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LIEBE🤍