Jugando "Tenga"... la versión china del Jenga / Playing “Tenga” ... the Chinese version of Jenga

En Argentina, la celebración del día del niño es en agosto, por lo que las tiendas se preparan para ofrecer productos para los más chicos de la casa, y así aprovechar de realizar buenas ventas.

Como ya los hijos de la dueña del supermercado están relativamente grandes, decidieron incorporar algunos juguetes a la sección de almacén, siendo los squeezys (peloticas anti-stress) que por tener colores llamativos, eran lo primero que veían los niños al entrar al local, incluyendo el mío.

Estuvo un par de horas insistiendo para comprarse uno, pero siempre me negué, sobre todo ahora que me he tomado más en serio el tema de la educación financiera de ellos, pues eso es algo que si bien quiere, es algo que no necesita. Pero ante su "necesidad" de comprarse algo, le propuse que adquiriera una pequeña torre de maderitas que estaban en un rincón.

Al principio se negó, pues no le veía ninguna finalidad, pero en cambio yo le veía un enorme potencial, pues se trataba de una versión china del juego llamado "jenga" al que llamaron estratégicamente "Tenga". Como supo que no ganaría esta vez, accedió a comprarlo, y de inmediato lo sacó para jugar.

Su primera partida fue con los dueños del supermercado, quienes no sabían cómo se jugaba y luego de yo explicarles, se animaron a probar. La partida estuvo reñida, pero al final ganó uno de ellos. Lo bueno fue que mi hijo no se molestó por perder, y de inmediato hizo otra torre para que jugáramos él y yo, aprovechando que estaba desocupada de mis obligaciones, y en este juego, él resultó triunfante.

Obviamente que al llegar a casa, quiso seguir jugando y a mi me gustó su emoción por ello, pues este juego no solo lo aparta de las pantallas, sino que le sirve para mejorar su agudeza visual, agilizar la concentración y pensar en estrategias, así que no es solamente retirar piezas evitando que la torre caiga, tiene también un trasfondo educativo que por supuesto yo aprovecho para desacelerarlo y ponerlo a analizar un poco.

Igualmente sigue queriendo el squeezy, pero está más que contento con este juego, que además nos permite compartir momentos de diversión y relax, sin necesidad de invertir ni mucho dinero y tampoco tiempo, como sucede con algunos juegos de mesa del estilo de Monopolio, por ejemplo.

Ahora tenemos una nueva manera de distraernos un rato, poniéndole a veces un poco más de tensión al juego, cuando vamos colocando las piezas extraídas sobre la torre, aunque hasta ahora solo vamos sacándolas y tratando de que queden en equilibrio.

In Argentina, the celebration of Children's Day is in August, so the stores are preparing to offer products for the children of the house, and thus take advantage of good sales.

As the children of the owner of the supermarket are relatively old, they decided to add some toys to the store section, being the squeezys (anti-stress balls) that, because of their bright colors, were the first thing the children saw when they entered the store, including mine.

He spent a couple of hours insisting to buy one, but I always refused, especially now that I have taken more seriously the issue of financial education for them, because that is something that although he wants, it is something he does not need. But faced with his “need” to buy something, I suggested that he buy a small tower of wood that was in a corner.

At first he refused, as he did not see any purpose for it, but instead I saw a huge potential, as it was a Chinese version of the game called “jenga” which was strategically called “Tenga”. Since he knew he would not win this time, he agreed to buy it, and immediately took it out to play.

His first game was with the owners of the supermarket, who did not know how to play and after I explained to them, they were encouraged to try. The game was close, but in the end one of them won. The good thing was that my son was not upset about losing, and immediately made another tower for him and me to play, taking advantage of the fact that I was free from my obligations, and in this game, he was triumphant.

Obviously when he got home, he wanted to continue playing and I liked his excitement about it, because this game not only takes him away from the screens, but also serves to improve his visual acuity, sharpen his concentration and think of strategies, so it is not only removing pieces to prevent the tower from falling, it also has an educational background that of course I take advantage of to slow him down and put him to analyze a little.

He still loves squeezy, but he is more than happy with this game, which also allows us to share moments of fun and relaxation, without the need to invest a lot of money and time, as it happens with some board games like Monopoly, for example.

Now we have a new way to distract ourselves for a while, sometimes putting a little more tension to the game, when we place the extracted pieces on the tower, although until now we only take them out and try to keep them in balance.


Foto/Photo by: @mamaemigrante
Edición/Edited by @mamaemigrante using canva
Translated and formatted with Deepl



0
0
0.000
12 comments
avatar

Este juego siempre me ha gustado a pesar de nunca haberlo jugado, solo lo he visto en TV y a través de otras personas, tampoco lo tengo.

Que bueno que tu niño le haya gustado, me imagino que podrá usarlo en la escuela en el tiempo de recreo.

0
0
0.000
avatar

Podría llevarlo a la escuela, pero no me arriesgo, pues capaz y se le pierden piezas. Ahora los niños no son como los de antes, y aunque confío en él, sus compañeros dan mucho que desear en cuanto a comportamiento.
Es un juego simple, pero muy entretenido.

0
0
0.000
avatar

Gane over.
Mejor suerte para la próxima.

0
0
0.000
avatar

Si! lo bueno es que yo no me enojo cuando pierdo, jajaja. Aunque él cada vez se enoja menos, pues lo pongo a pensar sobre cuál fue el error en su movida, tanto en este juego como en los otros que hacemos.

0
0
0.000
avatar

Alguna vez lo jugué, hay que tener buen pulso para no tirar la torre. Gracias por participar estimada @mamaemigrante. Un fuerte abrazo desde Maracay.

0
0
0.000
avatar

Si, es cuestión de pulso y de estrategia. Al principio yo siempre le ganaba, ahora veo que él está pensando más cada jugada y eso me encanta.

0
0
0.000
avatar

Nunca lo he jugado pero siempre me ha llamado la atención, se nota que la pasaran genial, me encantan esas caras de las fotos jeje, que buena edición 😉

0
0
0.000
avatar

Ya estamos un poco enviciados con el juego, pues hacemos varias partidas seguidas a diario.
Él es el "director de caras", cuando voy a tomar las fotos me dice: mamá, ahora tu haces así y yo me pongo así. jajaja

0
0
0.000
avatar

He jugado algo parecido pero con las piezas del domino, se ve muy divertido.

0
0
0.000
avatar

Kids are always drawn in this kind of games. They have passion for it and can go extra mile to play it by all means.

0
0
0.000