Yo empecé a ver Moving, luego de ver light shop, ya que ambas historias son del mismo creador y hubo un pequeño cameo de algunos de los actores en la de light shop, por tal motivo me anime de verla y la verdad, fue una sorpresa, no pensé que me gustara. Lo más sorprendente es que te venden la serie como de superhéroes, cuando es mucho más que eso, porque nos habla de cuán es difícil es llevar una vida normal, cuando tienes habilidades que demuestran que no eres normal, eres alguien con un dote y que, lamentablemente lo quieren usar para cosas malas o de doble moral; asimismo manifiesta que en la vida, aun sin un superpoder o más allá de ello, está en nuestro carácter, en nuestra voluntad, si decidimos ser héroes o monstruos, no alguien más, somos los que tenemos la llave para cambiar nuestro destino y dirigir hacia donde enfocar nuestras habilidades.

Resulta enriquecedor como el guion se estructura de a poco a poco, aunque hay bastantes flashbacks y muchas historias en sí, la verdad no se hace pesado, porque es la manera ideal como vamos empatizando con los personajes y entendiendo a donde quieren llegar. Existe un buen equilibro entre la acción y la profundidad de las emociones en la escenas, nos quieren dejar entender que son humanos y que actúan como tal, no por tener poderes los hacen seres sin sentimientos, es todo lo contrario, el que tengan estas capacidades sobrenaturales los vuelven vulnerables a personas con pensamientos meramente egoístas y poco humanos; en este punto, hacen ver que los poderes se han convertido para ellos más que una herramienta para ayudar, una carga, un peso que los abruma y nos les permite vivir como personas normales, en pocas palabras, para los ojos de los demás son armas y que deben actuar como tal, máquinas al servicio de una autoridad (por ello también podemos notar la crítica social que hace hacia los gobiernos autoritarios que hacen lo que sea para conseguir poder).

La proyección entonces de los personajes, de la serie Moving, es atractiva y muy notable, cada uno es destacable, se ve claramente esa lucha entre el bien y el mal, el amor y la violencia que, definitivamente, le dan fluidez a la trama, las motivaciones y los traumas con que cargan estos. La escenografía bien lograda, incluso los efectos especiales son bastantes correctos, no hay nada que reprochar y las actuaciones impecables.