TV SERIES (LIMITED) REVIEW: "João sem Deus - A Queda de Abadiânia" (2023)
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Synopsis: Carmem and Cecília are two sisters whose lives are turned upside down after crossing the path of João de Deus, a famous mystical leader who was popularized for his healing practices in the city of Abadiânia, Goiás. Brazil (and in a way, the world too) was shocked when a terrible truth about him came to light.
One of the biggest challenges in portraying and reproducing stories based on real events is legitimizing what has the greatest weight within a narrative line. In the case of this limited television series, the three episodes work with a very specific delimitation, and at the same time that it seeks to establish a unique approach to the topic, it also does so in a very respectful way (whether in relation to its personal or religious aspects), opting to have a more specific subjectivity so that the public itself can give its final verdict on everything that has been interpreted.
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In the search for a cure for different types of serious illnesses, people from different parts of Brazil (and also the world) end up being “seduced” by the work of the hitherto titled “medium” João Teixeira de Faria (77 years old), popularly known as João de Deus. Developing his practices at Casa de Dom Inácio de Loyola (in the city of Abadiânia, Goiás, Brazil), he ended up being the protagonist of a series of investigations involving sexual crimes that were committed by him against his victims (women) during the time in which he worked exactly in that place.
The script here is not exactly focused on the presence of the “religious leader” as the protagonist, but rather on the victims who suffered some type of abuse by him. This was a very important decision and one that paved the way for the project to gain much more strength (after all, the story that needed to be told was that of the victims and not their aggressor). Using the story of two sisters with completely different profiles (one is haunted by the past while the other deals with a reality that is difficult to accept), the plot impresses authenticity and truth.
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Although there are only three episodes, there is enough time for the script to be worked on intelligently. Using the counterpoint of the two sisters who need to face each other, and then unite against a common evil, the narrative argument of the story is connected with the needs of the characters themselves in trying to understand everything and do “justice” in their own way. However, the series does not stick to this single argument and bets everything on a psychological drama with much more depth, strongly including personal and religious dilemmas.
Limiting its approach to a specific time, the plot focuses on the events that precede the fall and arrest of the leader. So, everything seen in the project (which is an efficient mix of real events and many creative elements developed by the script with “poetic freedom” over the real facts) is a preview of its ethical and moral decline. Another interesting point in the script is how it oscillates (positively) between different layers to present different sides of the same story, without discrediting the work he did in curative terms.
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In this aspect, the script's job is not to judge. Each viewer gives their own sentence based on what they just watched and this subjectivity is another very assertive point in the plot. This will probably cause a lot of indignation among many people, but it is necessary to understand that not everything in the audiovisual world is not done with the intention of being strict. In this case, although there is robust evidence against a true criminal, the material does not see him as the centerpiece of everything, so the development of the victims is what satisfies the real essence of the situations.
Directed with a strong pulse by Marina Person, the plot captured very well (in a gradual and increasing way) what needed to be shown to the public. Playing the protagonists are actresses Bianca Comparato and Karine Teles (who are great in their respective characters). There is also the excellent presence of Marco Nanini giving life to João de Deus (with an almost “omnipresent” presence, considering the weight of his character, who even without much speaking manages to have a huge impact whenever he appears on screen) and a well-received supporting cast. chosen, active and very collaborative.
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João sem Deus - A Queda de Abadiânia is a bold story, but at the same time a little minimalist. It doesn't choose a specific side to stand on, it just tells an important fact within other different narratives that happen in parallel (but are connected to the same subject). A necessary, important and more than current work (in a broad sense of its complex roots) and serves as a big red alert about the sects that are literally disguised around the world as supposed support centers for people who are currently emotionally destabilized and susceptible any type of comfort.
“João sem Deus - A Queda de Abadiânia” (2023)
Sinopsis: Carmem y Cecília son dos hermanas cuyas vidas dan un vuelco tras cruzarse en el camino de João de Deus, un famoso líder místico que se popularizó por sus prácticas curativas en la ciudad de Abadiânia, Goiás, Brasil (y en cierto modo, la mundo también) se sorprendió cuando salió a la luz una terrible verdad sobre él.
Uno de los mayores desafíos a la hora de retratar y reproducir historias basadas en hechos reales es legitimar aquello que tiene mayor peso dentro de una línea narrativa. En el caso de esta serie de televisión limitada, los tres episodios trabajan con una delimitación muy concreta, y al mismo tiempo que busca establecer un acercamiento único al tema, también lo hace de una manera muy respetuosa (ya sea en relación a sus aspectos personales o religiosos), optando por tener una subjetividad más específica para que sea el propio público quien dé su veredicto final sobre todo lo interpretado.
En la búsqueda de una cura para distintos tipos de enfermedades graves, personas de diferentes partes de Brasil (y también del mundo) acaban siendo “seducidas” por la obra del hasta ahora titulado “médium” João Teixeira de Faria (77 años), conocido popularmente como João de Deus, desarrollando sus prácticas en la Casa de Dom Inácio de Loyola (en la ciudad de Abadiânia, Goiás, Brasil), terminó siendo protagonista de una serie de investigaciones sobre delitos sexuales que cometía contra sus víctimas. (mujeres) durante el tiempo en que trabajaron exactamente en ese lugar.
El guion aquí no se centra precisamente en la presencia del “líder religioso” como protagonista, sino en las víctimas que sufrieron algún tipo de abuso por parte de él. Esta fue una decisión muy importante y que abrió el camino para que el proyecto cobrara mucha más fuerza (al fin y al cabo, la historia que había que contar era la de las víctimas y no la de su agresor). Utilizando la historia de dos hermanas con perfiles completamente diferentes (una está perseguida por el pasado mientras la otra lidia con una realidad difícil de aceptar), la trama imprime autenticidad y verdad.
Aunque sólo son tres episodios, hay tiempo suficiente para trabajar el guión de forma inteligente. Utilizando el contrapunto de las dos hermanas que necesitan enfrentarse, para luego unirse contra un mal común, el argumento narrativo de la historia se conecta con las necesidades de los propios personajes de intentar comprenderlo todo y hacer “justicia” por sí mismos. forma. Sin embargo, la serie no se ciñe a este único argumento y apuesta todo por un drama psicológico con mucha más profundidad, que incluye fuertemente dilemas personales y religiosos.
Limitando su planteamiento a una época concreta, la trama se centra en los acontecimientos que preceden a la caída y arresto del líder. Así, todo lo visto en el proyecto (que es una eficiente mezcla de hechos reales y muchos elementos creativos desarrollados por el guión con “libertad poética” sobre los hechos reales) es un anticipo de su decadencia ética y moral. Otro punto interesante del guión es cómo oscila (positivamente) entre diferentes capas para presentar diferentes lados de una misma historia, sin desacreditar el trabajo que realizó en términos curativos.
En este aspecto, la labor del guión no es juzgar. Cada espectador da su propia frase en función de lo que acaba de ver y esta subjetividad es otro punto muy asertivo de la trama. Esto probablemente causará mucha indignación entre muchas personas, pero es necesario entender que no todo en el mundo audiovisual no se hace con intención de ser estricto. En este caso, aunque existen pruebas sólidas contra un verdadero criminal, el material no lo ve como la pieza central de todo, por lo que el desarrollo de las víctimas es lo que satisface la esencia real de las situaciones.
Dirigida con fuerte pulso por Marina Person, la trama captó muy bien (de forma paulatina y creciente) lo que había que mostrar al público. Las protagonistas son las actrices Bianca Comparato y Karine Teles (que están geniales en sus respectivos personajes). También está la excelente presencia de Marco Nanini dando vida a João de Deus (con una presencia casi “omnipresente”, considerando el peso de su personaje, que incluso sin hablar mucho logra tener un gran impacto cada vez que aparece en pantalla) y un Reparto bien recibido, elegido, activo y muy colaborador.
*** João sem Deus - A Queda de Abadiânia *** es una historia audaz, pero al mismo tiempo un poco minimalista. No elige un bando específico en el que posicionarse, simplemente cuenta un hecho importante dentro de otras narrativas diferentes que suceden en paralelo (pero que están conectadas con el mismo tema). Una obra necesaria, importante y más que actual (en el sentido amplio de su complejo arraigo) y que sirve como gran alerta roja sobre las sectas que se disfrazan literalmente en todo el mundo como supuestos centros de apoyo a personas que actualmente se encuentran desestabilizadas emocionalmente y susceptibles a cualquier tipo de comodidad.
“João sem Deus - A Queda de Abadiânia” (2023)
Sinopse: Carmem e Cecília são duas irmãs tem suas vidas reviradas após cruzarem o caminho de João de Deus, um famoso líder místico que foi popularizado por suas práticas curativas na cidade de Abadiânia, Goiás. O Brasil (e de certa forma, o mundo também) ficou chocado quando uma terrível verdade sobre ele veio à tona.
Um dos grandes desafios em retratar e reproduzir estórias baseadas em acontecimentos reais é legitimar o que tem maior peso dentro de uma linha narrativa. No caso desta série de televisão limitada, os três episódios trabalham com uma delimitação muito pontual, e ao mesmo tempo em que busca estabelecer uma abordagem singular sobre o tema, também o faz de maneira muito respeitosa (seja em relação aos seus aspectos pessoais ou religiosos), optando em ter uma subjetividade mais pontuais para que o próprio público dê o seu veredicto final sobre tudo o que foi interpretado.
Na busca de uma cura para diversos tipos de enfermidades graves, pessoas de diferentes partes do Brasil (e também do mundo) acabam sendo “seduzidos” pelo trabalho do até então intitulado “médium” João Teixeira de Faria (77 anos), popularmente conhecido como João de Deus. Desenvolvendo suas práticas na Casa de Dom Inácio de Loyola (na cidade de Abadiânia, Goiás, Brasil), ele acabou sendo o protagonista de uma série de investigações envolvendo crimes sexuais que foram cometidos por ele contra suas vítimas (mulheres) durante o tempo em que trabalhou exatamente naquele lugar.
O roteiro aqui não é focado exatamente na presença do “líder religioso” enquanto protagonista, mas sim, nas vítimas que foram sofreram algum tipo de abuso por parte dele. Essa foi uma decisão muito importante e que pavimentou os caminhos para que o projeto ganhasse muito mais força (afinal, a estória que precisava ser contada era a das vítimas e não do agressor delas). Usando a estória de duas irmãs com perfis completamente diferentes (uma está assombrada pelo passado enquanto à outra lida com uma realidade difícil de ser aceita), a trama imprime autenticidade e verdade.
Embora sejam apenas três episódios, há tempo o suficiente para que o roteiro seja trabalhado de maneira inteligente. Utilizando o contraponto das duas irmãs que precisam se enfrentar, para depois se unirem contra um mal em comum, o argumento narrativo da estória é conectado com as necessidades das próprias personagens em tentar entender tudo aquilo e fazer “justiça” à sua própria maneira. No entanto, a série não se prende a esse único argumento e aposta tudo em um drama psicológico com muito mais profundidade, incluindo fortemente dilemas, de ordem pessoal e religiosa.
Limitando sua abordagem em um tempo específico, na trama o foco está nos acontecimentos que antecedem a queda e à prisão do líder. Então, tudo o que é visto no projeto (que é uma eficiente mistura de acontecimentos reais e muitos elementos criativos desenvolvidos pelo roteiro com uma “liberdade poética” sobre os fatos reais) é uma prévia do seu declínio ético e moral. Outro ponto interessante do roteiro é como ele oscila (positivamente) entre diferentes camadas para apresentar diversos lados de uma mesma estória, não descreditando o trabalho feito por ele em termos curativos.
Neste aspecto, o trabalho do roteiro não é julgar. Cada telespectador dá à sua própria sentença se baseando no que acabou de assistir e essa subjetividade é outro ponto muito assertivo na trama. Provavelmente isso vai causar bastante indignação em muitas pessoas, mas é preciso entender que nem tudo no mundo do audiovisual nem tudo é feito com o pensamento de ser taxativo. Neste caso, embora hajam provas robustas contra um verdadeiro criminoso, o material não o vê como a peça central de tudo, então, o desenvolvimento das vítimas é que satisfaz à essência real das situações.
Dirigido com pulso forte por Marina Person, a trama captou muito bem (de forma gradual e crescente) o que precisava ser mostrado ao público. Na pele das protagonistas, estão as atrizes Bianca Comparato e Karine Teles (que estão ótimas em suas respectivas personagens). Há também a excelente presença de Marco Nanini dando vida a João de Deus (com uma presença quase “onipresente”, considerando o peso do seu personagem, que mesmo sem muitas falar consegue impactar bastante sempre que aparece na tela) e um elenco de apoio bem escolhido, atuante e bastante colaborativo.
João sem Deus - A Queda de Abadiânia é um relato ousado, mas ao mesmo tempo um pouco minimalista. Não escolhe um lado específico para se manter de pé, ele apenas conta um importante fato dentro de outras diferentes narrativas que acontecem de modo paralelo (mas que são conectadas ao mesmo assunto). Um trabalho necessário, importante e mais do que atual (em um sentido amplo de suas complexas raízes) e serve como um grande alerta vermelho sobre as seitas que estão literalmente disfarçadas pelo mundo como supostas centrais de apoio para pessoas que atualmente estão emocionalmente desestabilizadas e suscestíveis a qualque tipo de conforto.
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