MOVIE REVIEW: “The Squid and the Whale” (2005)

avatar
(Edited)

This publication was also writen in SPANISH and PORTUGUESE.

the_squid_and_the_whale01.jpg

IMDb

Synopsis: After successive problems in their relationship, Bernard and Joan (a typical Brooklyn couple) finally decide to put an end to their marriage, but what they didn't imagine was the damage that such a decision would cause in the lives of their two sons, Frank and Walt.

Human nature is never fully prepared to accept any type of separation. This can easily sound like something outside of our "mental configuration", especially when there are romantic ties involved in this relationship. This is a very common theme in dramatic cinema, and precisely in the case of this movie, the entire plot revolves around a couple who, upon deciding to separate, must now deal with the consequences of this act in the lives of their two children (with different ages and profiles). Here is an interesting dive into a scenario that is almost always obscure.

the_squid_and_the_whale02.jpg

Rolling Stone Brasil

In one way or another, breakups are always complicated. One party always tends to suffer more than the other, and when the relationship is already orbited by children, everything becomes even more challenging. Here, everything that happens is based on this dynamic. Bernard and Joan are no longer a couple, and decide to make it official by announcing their separation to their children, Frank and Walt. From that moment on, the “dysfunctional” relationship between them reaches increasingly intense, peculiar and unexpected levels, showing the impact of this decision on all of their lives.

The script is based on a very simple plot, without big moments or incredible twists. The dramas that a separation can cause are shown in a very genuine way, and uses the end of the 80s with an interesting setting of a famous neighborhood as a backdrop to pave the way for events to unfold as they wish. Although it is a fast movie (about 80 minutes), at times, everything seems like a long therapy session where it is possible to better understand everything that is happening through the perspective of each character.

the_squid_and_the_whale03.jpg

The Criterion Collection

As the movie develops, oscillating between drama and some comic scenes (which act as a very assertive “outlier”), an acidic atmosphere gradually gains space on the screen, being corroded by Bernard and Joan’s irony about their respective problems. Frank and Walt see the same situation from different points of view, and naturally end up acting in different ways. Frank sees the situation as a bridge to help him mature, while Walt finds himself lost in the “crossfire”, starting to act in a “troubled” way.

If you are a viewer who does not like this type of approach, you will certainly not like this movie, because everything presented here has, despite having a very solid construction, a slow path, without major oscillations or explosive moments. Everything is based on dilemmas that are the result of interactions between human beings, with ages, thoughts and behaviors that are totally different from each other (even though they are a family) that is apparently “united”, within their “dystopian” vision of life). In other words, it's almost a case study.

the_squid_and_the_whale04.png

PopMatters

If you are a viewer who likes this kind of approach, you will certainly like this movie for exactly the same reasons I mentioned in the previous paragraph, and also for all the reasons I will mention from now on. The main cast is composed of Jeff Daniels, Laura Linney, Owen Kline and Jesse Eisenberg. Absolutely all of them deliver sharp and coherent performances. Daniels and Linney play writers in “rise and fall” phases, while Kline and Eisenberg play young people who need to “survive” dramatic conflicts in order to evolve.

Noah Baumbach (who in addition to writing the script, also directed the entire project... in fact, he did a very sensitive and visceral job here and it is necessary to mention this because this is a very visible characteristic in the work of this filmmaker throughout his career) managed to extract the maximum quality from the cast he had at hand, and the result is truly a synergistic work, where even the work of the supporting cast (such as Anna Paquin and William Baldwin) has good visibility on screen. Everything in this movie was made to make the audience reflect, and that will really happen.

the_squid_and_the_whale05.png

Bill’s Movie Emporuim

The “curious” title of The Squid and the Whale fits this movie perfectly, because at a specific moment in the plot, the relationship between these two animals is explained in a sensitive dialogue, but it is essential to understand how the couple is seen from the perspective of one of the children, and how the audience makes this association between the two marine animals. An interesting “metaphor” about relationships, where constant fights can end up being the reason why everything ends and how this almost “symbiotic” relationship (in some cases) can be extremely harmful for everyone involved here.

[ OFFICIAL TRAILER ]


CRÍTICA DE PELÍCULA: “Una historia de Brooklyn” (2005)

Sinopsis: Tras sucesivos problemas en su relación, Bernard y Joan (una típica pareja de Brooklyn) finalmente deciden poner punto y final a su matrimonio, pero lo que no imaginaban era el daño que tal decisión causaría en la vida de sus dos hijos, Frank y Walt.

La naturaleza humana nunca está completamente preparada para aceptar ningún tipo de separación. Esto puede fácilmente sonar como algo fuera de nuestra “configuración mental”, especialmente cuando hay lazos amorosos en medio de esta relación. Este es un tema muy recurrente en el cine dramático, y precisamente en el caso de esta película, toda la trama gira en torno a una pareja que, al decidir separarse, ahora tiene que lidiar con las consecuencias de este acto en la vida de sus dos hijos (con diferentes edades y perfiles). He aquí una interesante inmersión en un escenario que casi siempre es oscuro.

De una forma u otra, las rupturas siempre son complicadas. Una de las partes siempre tiende a sufrir más que la otra, y cuando la relación ya está orbitada por los hijos, todo se vuelve aún más desafiante. Aquí todo lo que sucede se basa en esta dinámica. Bernard y Joan ya no son pareja, y deciden hacerlo oficial anunciando su separación a sus hijos, Frank y Walt. A partir de este momento, la relación “disfuncional” entre ellos alcanza niveles cada vez más intensos, peculiares e inesperados, mostrando el impacto de esta decisión en todas sus vidas.

El guión está construido a partir de una trama muy sencilla, sin grandes momentos ni giros increíbles. Los dramas que puede provocar una separación se muestran de una forma muy genuina, y utiliza el final de los 80 con una ambientación interesante de un barrio famoso como telón de fondo para dar paso a acontecimientos a su propia antojo. Aunque es una película rápida (unos 80 minutos), por momentos todo parece una larga sesión de terapia donde es posible comprender mejor todo lo que está sucediendo a través de la perspectiva de cada personaje.

A medida que la película se desarrolla, oscilando entre el drama y algunas escenas cómicas (que funcionan como un “outlier” muy asertivo), una atmósfera ácida gana espacio en la pantalla, siendo corroída por la ironía de Bernard y Joan sobre sus respectivos problemas. Frank y Walt ven la misma situación desde diferentes puntos de vista y, naturalmente, terminan actuando de maneras diferentes. Frank afronta la situación como un puente que le ayude a madurar, mientras Walt se encuentra perdido en medio del “fuego cruzado”, empezando a actuar de forma “problemática”.

Si eres un espectador al que no le gusta este tipo de planteamientos, seguro que no te gustará esta película, porque todo lo aquí presentado, a pesar de tener una construcción muy sólida, camina por un camino inerte, sin grandes oscilaciones ni momentos explosivos. Todo se basa en dilemas que son resultado de interacciones entre seres humanos, con edades, pensamientos y comportamientos totalmente diferentes entre sí (aunque sean una familia aparentemente “unida”, dentro de su visión “distópica” de la vida). En otras palabras, es casi un estudio de caso.

Si eres un espectador al que le gusta este tipo de planteamientos, seguro que esta película te gustará exactamente por las mismas razones que he mencionado en el párrafo anterior, y también, por todas las razones que mencionaré a partir de ahora. El reparto principal está formado por Jeff Daniels, Laura Linney, Owen Kline y Jesse Eisenberg. Absolutamente todos ellos ofrecen actuaciones nítidas y coherentes. Daniels y Linney interpretan a escritores en fases de “ascenso y caída”, mientras que Kline y Eisenberg interpretan a jóvenes que deben “sobrevivir” a conflictos dramáticos para poder evolucionar.

Noah Baumbach (quien además de escribir el guion, también dirigió todo el proyecto… de hecho, hizo un trabajo muy sensible y visceral aquí y es necesario mencionarlo porque es una característica muy visible en el trabajo de este cineasta a lo largo de su carrera) logró extraer la máxima calidad del elenco que tenía a mano, y el resultado es realmente un trabajo sinérgico, donde incluso el trabajo del elenco secundario (como Anna Paquin y William Baldwin) tiene buena visibilidad en pantalla. Todo en esta película fue hecho para hacer reflexionar al público, y eso realmente sucederá.

El “curioso” título de Una historia de Brooklyn le viene como anillo al dedo a esta película, pues en un momento concreto de la trama, se explica la relación entre estos dos animales en un diálogo sensible, pero que resulta imprescindible para entender cómo es vista la pareja a los ojos de uno de los niños, y cómo el público hace esta asociación entre los dos animales marinos. Una interesante “metáfora” sobre las relaciones, donde las peleas constantes pueden terminar siendo la razón por la que todo termina y cómo esta relación casi “simbiótica” (en algunos casos) puede ser extremadamente dañina para todos los involucrados aquí.


CRÍTICA DE FILME: “A Lula e a Baleia” (2005)

Sinopse: Após sucessivos problemas em seu relacionamento, Bernard e Joan (um típico casal do Brooklyn) finalmente decidem colocar um ponto final no casamento deles, mas o que eles não imaginavam era o estrago que tal decisão iria causar na vida dos seus dois filhos, Frank e Walt.

A natureza humana nunca está devidamente pronta para aceitar qualquer tipo de separação. Isso facilmente pode soar como algo fora da nossa “configuração mental”, principalmente quando existem laços amorosos no meio dessa relação. Isso é um tema muito recorrente dentro do cinema dramático, e precisamente no caso deste filme, toda trama gira em torno de um casal que ao decidir se separar, precisa lidar agora com as consequências desse ato na vida dos seus dois filhos (com idades e perfis diferentes). Eis aqui um mergulho interessante em um cenário que quase sempre é obscuro.

De uma maneira ou de outra, términos de relacionamentos sempre são complicados. Uma parte sempre tende a sofrer mais do que a outra, e quando o relacionamento já é orbitado por filhos, tudo fica ainda mais desafiador. Aqui, tudo o que acontece é em função dessa dinâmica. Bernard e Joan não são mais um casal, e decidem oficializar isso anunciando a separação deles para os seus filhos, Frank e Walt. A partir deste momento, a “disfuncional” relação entre eles atinge níveis cada vez mais intensos, peculiares e inesperados, mostrando então o relexo dessa decisão na vida de todos eles.

O roteiro é construído com base numa trama muito simples, sem grandes momentos ou reviravoltas mirabolantes. Os dramas que uma separação pode causar são mostrados de uma maneira muito genuína, e usa o final da década de 80 com uma ambientação interessante de um famoso bairro como plano de fundo para pavimentar os acontecimentos à sua própria vontade. Embora seja um filme rápido (cerca de 80 minutos), em alguns momentos, tudo parece uma longa sessão de terapia onde é possível entender melhor tudo o que está acontecendo através da visão de cada personagem.

Enquanto o filme vai sendo desenvolvido oscilando entre o drama e algumas cenas cômicas (que funcionam como um “ponto fora da curva” bem assertivo), uma atmosfera ácida vai conseguindo espaço na tela, sendo corroída pela ironia de Bernard e Joan sobre os seus respectivos problemas. Frank e Walt enxergar a mesma situação com diferentes pontos de vista, e naturalmente acabam agindo de maneiras distintas. Frank encara à situação com uma ponte para conseguir amadurecer, enquanto Walt se vê perdido no meio do “fogo cruzado”, começando a agir de uma maneira “conturbada”.

Se você for um telespectador que não gosta desse tipo de abordagem, certamente não irá gostar desse filme, porque tudo o que é apresentado aqui tem, mesmo tendo uma construção muito sólida, caminha por uma estrada inerte, sem grandes oscilações ou momentos explosivos. Tudo é fundamentado em dilemas que são resultados de interações entre seres humanos, com idades, pensamentos e comportamentos totalmente distintos entre si (mesmo sendo uma família) aparentemente “unida”, dentro de sua “distópica” visão sobre à vida). Em outras palavras, é quase um estudo de caso.

Se você for um telespectador que gosta desse tipo de abordagem, certamente irá gostar desse filme exatamente pelas mesmas razões que eu mencionei no parágrafo anterior, e também, por todas as razões que eu irei mencionar de agora em diante. O elenco principal é composto por Jeff Daniels, Laura Linney, Owen Kline e Jesse Eisenberg. Absolutamente todos eles entregam performances afiadas e coerentes. Daniels e Linney interpretam escritores em fases de “ascensão e queda”, enquanto Kline e Eisenberg interpretam jovens que precisam “sobreviver” a conflitos dramáticos para evoluir.

Noah Baumbach (que além de escrever o roteiro, também dirigiu todo o projeto... aliás, fez um trabalho muito sensível e visceral aqui e é preciso mencionar isso porque essa uma característica muito visível nos trabalhos desse cineasta ao longo de toda à sua carreira) conseguiu extrair o máximo de qualidade do elenco que ele tinha em mãos, e o resultado é mesmo um trabalho sinérgico, onde até mesmo o trabalho do elenco de apoio (como Anna Paquin e William Baldwin) tem uma boa visibilidade na tela. Tudo nesse filme foi feito para fazer o público refletir, e isso realmente vai acontecer.

O “curioso” título de A Lula e a Baleia cai como uma luva para este filme, porque em um momento específico da trama, a relação entre esses dois animais é explicada em um diálogo sensível, mas que é essencial para entender como o casal é visto na visão de um dos filhos, e como o público faz essa associação entre os dois animais marinhos. Uma “metáfora” interessante sobre relacionamentos, onde as constantes brigas podem acabar sendo a razão pela qual tudo termina e como essa relação quase “simbiótica” (em alguns casos) pode ser extremamente danosa para todos os envolvidos aqui.

Posted Using INLEO



0
0
0.000
1 comments
avatar

I was so curious reading your review my friend. I think I'm more excited to watch it. I'll have my friends next weekend and we will watch this.

0
0
0.000