MOVIE REVIEW: “The Loft” (2014)

Synopsis: An exclusive (and luxurious) apartment is used by five married friends as a "secret place" to keep their extramarital affairs hidden from the eyes of others (especially their respective wives). However, when the body of a mysterious woman is found there, their situation takes a dramatic turn.

Betrayal, money, sexual abuse, mystery, psychopathy, control, misogyny, narcissism, power, and murder... These are just some of the main aspects that tie together this intricate plot, which is full of suspense and countless plot twists. All of this unfolds within an atmosphere that is sometimes cheesy and over-the-top (negatively speaking), but still manages to be extremely engaging and intriguing within the movie's most important themes, the main one being to keep the audience engaged with each surprise.

The fortress of holy matrimony (as it is religiously known throughout the world) is shattered by the irrefutable lust (for the female body) of five married men, each with completely different personalities. However, they all maintain a bond that connects them: the lust for betrayal (in this case, highlighting not only the sin of the flesh... but mainly, a game of complex and immeasurable proportions, where a part of male predatory behavior is highlighted under already known contours, but which are much more intensified by their actions).

Vincent, Chris, Luke, Marty, and Philip maintain a bond of "friendship" sustained solely by their respective desires to cheat on their respective wives. When they decide to share a luxury apartment (where each of them has a private copy of the key to use whenever they want, maintaining only one communication channel between them to avoid "scheduling conflicts") so they can keep their random affairs with other women a secret, they never imagined that this idea would become their worst nightmare.

On any given day, when one of them enters the apartment, they find a woman's body covered in blood inside. The young woman's bloodied locks lying on the bed indicate a brutal crime has been committed. The culprit is unknown, but only the five friends have copies of the keys (which are unique). This means the crime was presumably committed by one of them (or by someone who had access to their keys), and this is the question of strong narrative development that "envelops" the entire plot in a veritable rollercoaster of suspense.

The script is fast-paced, dynamic, and unpretentious in throwing the audience into a tightly knit plot with all its threads (which ultimately triggers a veritable "electric discharge" of mysteries in the viewer). Perhaps the only negative point in this aspect here is the excess of surprises, because in a certain way, this undermines the weight of some revelations that should have been better worked within the narrative, but this is not a problem at all, because even so, the surprise factor remains very relevant and surprising throughout the plot.

In any case, director Erik Van Looy's skillful handling of events consistently evokes a sense that nothing is as it seems. While each of the friends is interrogated by the police (as the movie unfolds, featuring alternate scenes between the past and present), the dynamic of the script, written by Bart De Pauw and Wesley Strick, is quite synergistic, making this remake (inspired by the original Belgian movie, directed by Bart De Pauw) a "devilishly entertaining" project.

The characters are all morally negatively affected (especially the male characters), sparking discussions about a part of nature supposedly intrinsic to all men and women who succumb to betrayal in their various contexts. Although there are moments of "redemption" where the script attempts to "separate" the good guys from the bad guys, none of the main characters (male or female) are innocent. This brings up a very consistent dichotomy about morality and behavioral ethics, even though it is not explored much in the script.

The Loft features Karl Urban, James Marsden, Rachael Taylor, Wentworth Miller and Isabel Lucas in the cast, and while none of them (and certainly none of the supporting cast) deliver memorable performances, what they do is enough to sustain the narrative (which itself carries the entire project bravely). Although it's a movie that errs on the side of excessive argument in its attempt to entertain and shock its audience, it's important to recognize that this is a project brimming with tentacles capable of embracing those on the other side.

Sinopsis: Un exclusivo (y lujoso) apartamento es utilizado por cinco amigos casados como "lugar secreto" para mantener sus aventuras extramatrimoniales ocultas a los ojos de los demás (especialmente de sus respectivas esposas). Sin embargo, cuando se encuentra allí el cuerpo de una misteriosa mujer, su situación da un giro dramático.

Traición, dinero, abuso sexual, misterio, psicopatía, control, misoginia, narcisismo, poder y asesinato... Estos son solo algunos de los aspectos principales que unen esta intrincada trama, llena de suspense e innumerables plot twists. Todo esto se desarrolla en una atmósfera a veces cursi y exagerada (en el sentido negativo), pero que aun así logra ser sumamente atractiva e intrigante dentro de los temas más importantes de la película, el principal de los cuales es mantener al público enganchado con cada sorpresa.

La fortaleza del sagrado matrimonio (como se le conoce religiosamente en todo el mundo) se ve destrozada por la irrefutable lujuria (por el cuerpo femenino) de cinco hombres casados, cada uno con personalidades completamente diferentes. Sin embargo, todos mantienen un vínculo que los conecta: el deseo de traición (en este caso, resaltando no solo el pecado de la carne... sino principalmente, un juego de proporciones complejas e inconmensurables, donde parte del comportamiento depredador masculino se destaca bajo contornos ya conocidos, pero que se intensifican mucho más con sus acciones).

Vincent, Chris, Luke, Marty y Philip mantienen un vínculo de "amistad" sustentado únicamente por sus respectivos deseos de engañar a sus respectivas esposas. Cuando deciden compartir un apartamento de lujo (donde cada uno tiene una copia privada de la llave para usar cuando quiera, manteniendo un solo canal de comunicación entre ellos para evitar conflictos de agenda) para mantener en secreto sus aventuras amorosas con otras mujeres, nunca imaginaron que esta idea se convertiría en su peor pesadilla.

En un día cualquiera, cuando uno de ellos entra al apartamento, encuentra el cuerpo de una mujer cubierto de sangre. Los mechones ensangrentados de la joven, sobre la cama, indican que se ha cometido un crimen brutal. Se desconoce el culpable, pero solo los cinco amigos tienen copias de las llaves (que son únicas). Esto significa que el crimen fue presuntamente cometido por uno de ellos (o por alguien que tuviera acceso a sus llaves), y de ahí la importancia de un sólido desarrollo narrativo que envuelve toda la trama en una auténtica montaña rusa de suspense.

El guion es ágil, dinámico y sin pretensiones, sumergiendo al público en una trama intrincada con todos sus hilos (lo que finalmente desencadena una auténtica descarga eléctrica de misterios en el espectador). Quizás el único punto negativo en este aspecto aquí es el exceso de sorpresas, pues en cierta manera esto le resta peso a algunas revelaciones que deberían haber sido mejor trabajadas dentro de la narrativa, pero esto no es un problema en absoluto, porque aún así, el factor sorpresa sigue siendo muy relevante y sorprendente a lo largo de la trama.

En todo caso, la hábil gestión de los acontecimientos por parte del director Erik Van Looy evoca constantemente la sensación de que nada es lo que parece. Mientras cada uno de los amigos es interrogado por la policía (a medida que se desarrolla la película, con escenas alternas entre el pasado y el presente), la dinámica del guion, escrito por Bart De Pauw y Wesley Strick, es bastante sinérgica, convirtiendo este remake (inspirado en la película belga original, dirigida por Bart De Pauw) en un proyecto “endiabladamente entretenido”.

Todos los personajes se ven moralmente afectados negativamente (especialmente los masculinos), lo que genera debates sobre una parte de la naturaleza supuestamente intrínseca a todos los hombres y mujeres que sucumben a la traición en sus diversos contextos. Aunque hay momentos de "redención" donde el guion intenta "separar" a los buenos de los malos, ninguno de los personajes principales (ni hombres ni mujeres) es inocente. Esto plantea una dicotomía muy constante sobre la moral y la ética del comportamiento, aunque no se explora mucho en el guion.

El loft cuenta con Karl Urban, James Marsden, Rachael Taylor, Wentworth Miller e Isabel Lucas en el reparto, y aunque ninguno de ellos (y mucho menos ninguno del reparto secundario) ofrece actuaciones memorables, lo que hacen basta para sostener la narrativa (que, por sí sola, sostiene con valentía todo el proyecto). Si bien es una película que peca de argumentación excesiva en su intento de entretener y escandalizar al público, es importante reconocer que este proyecto rebosa de tentáculos capaces de abrazar a quienes están en el otro bando.

Sinopse: Um apartamento exclusivo (e luxuoso) é usado por cinco amigos (casados) como um “local secreto” para que eles mantenham os seus casos extraconjugais longe dos olhares de outras pessoas (especialmente de suas respectivas esposas). Porém, quando o corpo de uma mulher misteriosa é encontrado no lugar, a situação deles se torna dramática.

Traição, dinheiro, abuso sexual, mistério, psicopatia, controle, misoginia, narcisismo, poder e assassinato... Estes são só alguns dos principais aspectos que atam os nós desta intricada trama, que é repleta de suspense, além de inúmeros plot twits. Tudo isso acontecendo dentro de uma atmosfera que por vezes é muito cafona e exagerada (negativamente falando), mas que ainda consegue ser extremamente envolvente e intrigante dentro das propostas que mais importam para o filme, sendo a principal delas manter o interesse da audiência sobre o que está acontecendo a cada surpresa.

A fortaleza do sagrado matrimônio (como é religiosamente conhecido mundo à fora) é quebrada pela cobiça irrefutável de cinco homens casados (pelo corpo feminino), que tem personalidades completamente distintas entre si. No entanto, todos eles mantêm um laço que os conecta: a luxúria pela traição (neste caso, evidenciando não apenas o pecado da carne... mas principalmente, um jogo de proporções complexas e imensuráveis, onde uma parte do comportamento predatório masculino é realçada sob contornos já conhecidos, mas que são muito mais intensificados pelas suas ações).

Vincent, Chris, Luke, Marty e Philip mantém um elo de “amizade” que é sustentado unicamente pelos seus respectivos desejos relacionados a trair suas respectivas esposas. Quando eles decidem compartilhar um mesmo apartamento de luxo (onde cada um deles tem uma cópia particular da chave para usar quando eles quiserem, mantendo apenas uma comunicação entre eles para não haver um “conflito de agendas”) para que eles consigam manter em segredo os seus casos aleatórios com outras mulheres, eles não imaginavam que essa ideia se tornaria no pior pesadelo da vida deles.

Em um dia qualquer, quando um deles entra no apartamento, há um corpo de uma mulher banhado em sangue dentro lugar. As madeixas ensanguentadas da jovem deitada na cama evidenciam que um crime brutal foi cometido. O culpado é desconhecido, mas apenas os cinco amigos têm às cópias das chaves (que são únicas). Isso quer dizer que o crime foi supostamente cometido por um deles (ou por alguém que teve acesso as chaves deles), e esse é o questionamento de forte desenvolvimento narrativo que “envelopa” toda à trama dentro de uma verdadeira montanha-russa de suspense.

O roteiro é ágil, dinâmico e não faz a menor cerimônia ao jogar o público dentro de uma trama muito bem “conectada” com todos os seus fios (o que acaba desencadeando uma verdadeira “descarga elétrica” de mistérios no telespectador). Talvez o único ponto negativo neste aspecto aqui seja o excesso de surpresas, porque de uma certa maneira, isso mina o peso de algumas relevações que deveriam ter sido melhor trabalhadas dentro da narrativa, mas nem de longe isso é um problema, porque mesmo assim, o fator surpresa se mantém muito relevante e surpreendente sobre toda à trama.

De qualquer maneira, o modo como os acontecimentos são conduzidos pelo diretor Erik Van Looy foi bem habilidoso, trazendo sempre uma sensação de que nada é o que parece ser, porque enquanto cada um dos amigos é interrogado pela polícia (à medida em que o filme vai sendo desenvolvido, trazendo cortes de cenas alternativos entre passado e presente), a dinâmica do roteiro escrito pela dupla Bart De Pauw e Wesley Strick é bastante sinérgica, tornando esse remake (inspirado no filme original belga, que foi dirigido por Bart De Pauw) em um projeto “diabolicamente divertido”.

Os personagens são todos moralmente afetados negativamente (principalmente os personagens masculinos), trazendo discussões sobre uma parte da natureza que é supostamente intrínseca a todos os homens e mulheres que se rendem as traições em suas diferentes contextualizações. Embora haja momentos de “redenção” onde o roteiro tenta “separar” os mocinhos dos bandidos, nenhum dos personagens principais são inocentes (sejam os homens ou as mulheres). Isso traz uma dicotomia muito consistente sobre moral e ética comportamental, ainda que não muito explorada no roteiro.

Prazeres Mortais traz no seu elenco nomes como Karl Urban, James Marsden, Rachael Taylor, Wentworth Miller e Isabel Lucas, e embora nenhum deles (e muito menos o elenco de apoio) entreguem performances memoráveis, o que eles fazem é suficiente para sustenta o peso da narrativa (que por si só carrega todo o peso do projeto bravamente). Ainda que seja um filme que peca pelo excesso argumentativo na tentativa de entreter e, ao mesmo tempo, chocar o público, é preciso reconhecer que eis aqui um projeto que é repleto de tentáculos capazes de abraçar quem está do outro lado.