Sushi en la playa!!! - [Esp/Eng]

Hola a todos, bienvenidos a mi blog.

El aburrimiento mata, y sobretodo si eres un adulto de mediana edad con una hija adolescente y sus amigos. Pues eso pensó el papá de mi amiga Gabriela, el señor Eduardo, quién decidió invitarnos a comer sushi después de estar viendo un juego de fútbol a mediodía y que se fuera la luz.
Nos dijo a todos que tomáramos nuestras cosas, que iriamos en una aventura. Y efectivamente así fue, fuimos a Tokyo sushi a pedir para llevar. Confieso que no le tenía mucha fé, pues era mi primera vez en Tokyo sushi. Pedimos para llevar, y nos entregaron el sushi en una caja para pizza, lo cual fue muy curioso. Ahora con el sushi en manos, entramos en una discusión por saber a dónde iríamos a comer el sushi, y el señor Eduardo propuso un encantador sitio misterioso.

Nos metimos en el carro y empezamos a andar por caminos que nunca en mi vida había transitado, hasta llegar a un extraño camino a las afueras de la localidad de Pampatar. Nos anticipó que era una playita escondida, y que debíamos caminar un par de metros para llegar. Atravesamos camino de dudoso andar, con muchos árboles y ramas y llegamos a un pequeño lugar entre 2 montañitas: una pequeña playa privada.

Allí, nos sentamos a comer el sushi mientras conversábamos de la vida y de lo bonito que era coincidir como compañeros de la universidad, y ahora como amigos.

Gracias a todos por leer y compartir. La vida es bella. Y lo es todos los días. Hasta la próxima.

Hello everyone, welcome to my blog.

Boredom kills, especially if you are a middle-aged adult with a teenage daughter and her friends. That's what my friend Gabriela's father, Mr. Eduardo, thought, so he decided to invite us to eat sushi after watching a football game at noon and the power went out.
He told us all to grab our things, that we were going on an adventure. And that's exactly what happened. We went to Tokyo Sushi to order takeaway. I confess I didn't have much faith in it, as it was my first time at Tokyo Sushi. We ordered takeaway, and they gave us the sushi in a pizza box, which was very curious. Now with the sushi in hand, we got into a discussion about where we would go to eat it, and Mr Eduardo suggested a charming, mysterious place.

We got in the car and started driving along roads I had never travelled before, until we reached a strange road on the outskirts of the town of Pampatar. He told us it was a hidden beach and that we had to walk a couple of metres to get there. We crossed a rough path, with many trees and branches, and arrived at a small place between two small hills: a small private beach.

There, we sat down to eat sushi while we talked about life and how nice it was to meet as university classmates and now as friends.

Thank you all for reading and sharing. Life is beautiful. And it is every day. See you next time.