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Bienvenidos a mi blog.

Hoy voy a hablarles sobre un tema muy peculiar que últimamente ha captado mi atención en la vida, y es que he observado que ciertos patrones de ciertas cosas se repiten tanto a nivel de mi vida como en la vida de todos los seres humanos, no como sociedad sino como planeta.

Por ejemplo, es casi común, muy común, que generalmente el inicio del ciclo del siglo (perdón, de 1900 a 1930) siempre sea muy lento, desfasado, difícil, controvertido, en el sentido de que hay pocos avances, que las cosas son muy rudimentarias y rústicas.

Si hacemos una analogía o comparación con nuestras vidas, nos damos cuenta de que nuestra vida al principio también comienza lentamente cuando somos jóvenes, cuando somos niños.

Aún no sabemos caminar, y en las primeras etapas comenzamos a tropezar, a aprender, a dar un paso, luego otro, y así evolucionamos hasta lograr ponernos de pie.

Lo mismo ocurre con nuestros ciclos de humanidad.

En los primeros años, hasta 1930, comenzamos a aprender a caminar, nuestros primeros pasos en avances relacionados con la cultura, los inventos, y luego nos detenemos para erguirnos y comenzar a caminar.

La muestra de esto es cuando llegó la revolución industrial mucho más tarde en el ciclo, la revolución francesa, la primera guerra mundial, la segunda guerra mundial, donde desarrollamos cada vez más tecnologías y más cosas.

Esto me lleva a la reflexión de lo que les estoy contando: que en la vida, particularmente en la mía, esos ciclos se repiten.

Ciclos donde de repente las cosas van extremadamente mal o extremadamente lentas, difíciles, con obstáculos para obtener cosas, y de pronto llega un período que suele ser muy breve, como se muestra en comparación con esta analogía histórica, donde estos períodos de bienestar suelen ser muy cortos en comparación con todas las dificultades que diferentes sociedades y la humanidad han tenido que atravesar.

El período de bienestar dura quizás unos 10 años.

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Tal es el caso que pongo como ejemplo el período de bienestar venezolano que recuerdo muy bien.

Teníamos una frase muy nuestra que decíamos: "está barato, dame dos", la época del mayamer venezolano, como se decía porque íbamos a Miami o ellos iban a Miami (ya que yo nunca logré viajar fuera del país), y fue una buena época.

Hubo un tiempo en que podíamos disfrutar comiendo en restaurantes cada fin de semana, haciendo viajes, divirtiéndonos, yendo al cine, a fiestas, disfrutando la vida como realmente era porque había abundancia económica.

Nuestras neveras estaban llenas de comida y podíamos disfrutar de esas cosas.

Hoy la disparidad es enorme.

Hay personas que pueden disfrutar de eso, pero la división social a nivel de riqueza en el país que existe actualmente es muy grande.

Este asunto está muy polarizado porque, por un lado, hay personas que comen todos los días y vemos gente en restaurantes haciendo mercados de 200, 300 dólares o más en bodegones y supermercados famosos, y por otro lado hay otra gran parte de la población, me atrevería a decir que un 50% hasta 60%, que no puede permitirse esos lujos de ir a bodegones y comer polleras todos los días y disfrutar.

Entonces hay una gran disparidad, una gran diferencia, y esto tiene que ver con los ciclos de los que les hablo.

Porque recientemente he estado sufriendo un ciclo de más de 30 años de dificultades, de enfermedades, del cual aún no he salido, pero aparentemente, hace unos días, recibí como un golpe de bienestar, de cosas positivas que comenzaron a pasarme y que al menos me han ayudado a resolver algunos gastos.

Recuerden que hace mucho tiempo mencioné que estaba preocupado por pagar una deuda de 400 dólares en mi condominio, y bueno, afortunadamente, con este golpe de suerte que recibí estos días, logré reducir casi el 70% de esa deuda.

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Todavía necesito pagar como 120 o 140 dólares, pero la deuda es mucho más pequeña y estoy mucho más tranquilo porque, al momento de escribir esta publicación, sé que probablemente en un mes o dos como máximo habré saldado esa deuda.

Otras cosas que me han pasado, como el hecho de que pronto podré adquirir unos pantalones. De hecho, en el momento de escribir esta publicación, estoy esperando que me los entreguen esta semana.

También tendré pronto una cámara web que estoy esperando que llegue, y otros detalles que necesito arreglar en la casa.

Pero en sí, lo que quiero destacar en esta publicación es esa curiosidad de que estos ciclos en la vida parecen estar programados tanto a nivel individual como social, como si, como les digo, al inicio del ciclo las cosas van a suceder muy lentamente y luego avanzan.

Es decir, siempre es como una repetición, y es interesante porque me he dado cuenta y observado esto no solo en lo que les cuento sobre Venezuela y mi vida, sino en el desarrollo de otros países como Estados Unidos, China e India, que tienen este tipo de patrones, donde sus períodos de bondad y felicidad siguen una matriz que se repite cada cierto tiempo.

Esto me hace pensar, reflexionar: ¿será que estamos viviendo dentro de una simulación y que todo está programado y destinado a funcionar de cierta manera? ¿Que el universo tiene esas leyes y ese funcionamiento, y que la mayoría de nosotros aún no entendemos esos misterios de las cosas que suceden en el universo? Y que hasta que evolucionemos más espiritualmente, no podremos comprenderlo.

Sin embargo, hay personas como yo que se dan cuenta de estos detalles, y me parece curioso como minimo...

Al leer esto, ¿sientes que tienes estos patrones que se repiten en tu vida? ¿Te has dado cuenta de estos pequeños detalles o cosas que cada cierto tiempo se repiten en tu vida y que suelen ocurrirte en los mismos años?.

Es algo bastante curioso.

Si es así, déjamelo saber en los comentarios, y te agradezco por llegar a esta publicación cuyo tema ha sido libre hoy pero que me ha parecido bastante interesante, y es algo que me ha estado rondando hace mucho tiempo.

Bueno, muchas gracias por leerme, y hasta la próxima oportunidad.

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“The universe is not just strangely than we imagine, but more strange than we can imagine.”
<< J.B.S. Haldane >>

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Welcome to my blog.

Today I am going to talk to you about a very peculiar issue that lately has captured my attention in life, and I have observed that certain patterns of certain things are repeated both at the level of my life and in the life of all human beings, not as a society but as a planet.

For example, it is almost common, very common, that generally the beginning of the cycle of the century (forgiveness, from 1900 to 1930) is always very slow, outdated, difficult, controversial, in the sense that there are few advances, that things are very rudimentary and rustic.

If we make an analogy or comparison with our lives, we realize that our life at the beginning also begins slowly when we are young, when we are children.

We still do not know how to walk, and in the early stages we begin to stumble, to learn, to take a step, then another, and thus evolve until we stand up.

The same goes for our humanity cycles.

In the first years, until 1930, we began to learn to walk, our first steps in advances related to culture, inventions, and then stop to erect and start walking.

The sample of this is when the industrial revolution arrived much later in the cycle, the French Revolution, World War I, World War II, where we develop more and more technologies and more things.

This leads me to the reflection of what I am telling you: that in life, particularly in mine, those cycles are repeated.

Cycles where things are suddenly extremely or extremely slow, difficult, with obstacles to obtaining things, and suddenly comes a period that is usually very brief, as shown compared to this historical analogy, where these periods of well -being are usually very short compared to all the difficulties that different societies and humanity have had to cross.

The period of welfare perhaps about 10 years.

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Such is the case that I give as an example the period of Venezuelan well -being that I remember very well.

We had a very ours phrase that we said: "It's cheap, give me two", the time of Venezuelan Mayamer, as it was said because we were going to Miami or they went to Miami (since I never managed to travel outside the country), and it was a good time.

There was a time when we could enjoy eating in restaurants every weekend, making trips, having fun, going to the cinema, parties, enjoying life as it really was because there was economic abundance.

Our refrigerators were full of food and we could enjoy those things.

Today the disparity is huge.

There are people who can enjoy that, but the social division at the level of wealth in the country that currently exists is very large.

This issue is very polarized because, on the one hand, there are people who eat every day and see people in restaurants making markets of 200, 300 dollars or more in famous still lifes and supermarkets, and on the other hand there is another large part of the population, I would dare to say that 50% up to 60%, that those luxuries of going to Bodyegons cannot afford and eating folds every day and enjoying.

Then there is a great disparity, a big difference, and this has to do with the cycles I am talking about.

Because I have recently been suffering a cycle of more than 30 years of difficulties, of diseases, which I have not yet left, but apparently, a few days ago, I received as a blow of well -being, of positive things that began to happen to me and that at least have helped me solve some expenses.

Remember that a long time ago I mentioned that I was worried about paying a debt of $ 400 in my condominium, and well, fortunately, with this blow of luck I received these days, I managed to reduce almost 70% of that debt.

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I still need to pay about $ 120 or 140, but the debt is much smaller and I am much quieter because, at the time of writing this publication, I know that probably in a month or two I will have settled that debt.

Other things that have happened to me, such as the fact that I can soon acquire pants. In fact, at the time of writing this publication, I am waiting for them to give them this week.

I will also have a webcam that I am waiting for it to arrive, and other details that I need to fix in the house.

But in itself, what I want to highlight in this publication is that curiosity that these cycles in life seem to be scheduled both at the individual and social level, as if, as I say, at the beginning of the cycle things will happen very slowly and then advance.

That is, it is always like a repetition, and it is interesting because I have noticed and observed this not only in what I tell you about Venezuela and my life, but in the development of other countries such as the United States, China and India, which have this type of patterns, where their periods of goodness and happiness follow a matrix that is repeated every so often.

This makes me think, reflect: is it that we are living within a simulation and that everything is scheduled and destined to function in a certain way? That the universe has those laws and that functioning, and that most of us still do not understand those mysteries of the things that happen in the universe? And that until we evolve more spiritually, we will not be able to understand it.

However, there are people like me who realize these details, and it seems curious as a minimum ...

When reading this, do you feel that you have these patterns that are repeated in your life? Have you noticed these small details or things that are repeated in your life every so often and that usually happen in the same years?

It is quite curious.

If so, let it know in the comments, and I thank you for getting to this publication whose topic has been free today but that I found quite interesting, and it is something that has been around me a long time ago.

Well, thank you very much for reading me, and until the next opportunity.

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