Mi hijo adolescente se fue de fiesta de 18! / My teenage son went on an 18 year party!

Hay varios hitos en la maternidad que nos causan temor, pero cuando llega la adolescencia, es como si un maremoto llegara mientras estás nadando tranquilamente, y no terminas de reaccionar cuando ya llega otro hito que superar.

En mi caso, el inicio de la adolescencia de mi hijo mayor coincidió con el tiempo de pandemia, por lo que el cambio a secundaria, hacer nuevos amigos, y demás situaciones propias de esa primera etapa no las viví... hasta ahora.

Hace un par de semanas, mi hijo me dice que quiere ir al cumpleaños número 18 de uno de sus amigos (él es el menor del grupo) y por supuesto, las alarmas se encendieron, hasta que me dijo que sería de día y cerca de casa.

Ya desde hace algún tiempo se va a reunir con sus amigos en la casa de alguno de ellos, e inclusive se queda por diversión para él - y tranquilidad para mi -, pero en este caso, iría a un salón de fiesta con personas que yo no conozco y ese era mi temor.

La reunión fue un domingo, desde las 14:00 hasta las 17:00, algo sencillo para que el festejado compartiera con sus amigos y familiares.

Al regresar, su cara de felicidad lo decía todo, lo pasó increíble, aunque no sabe (ni se atreve) bailar, pero estuvo en un ambiente diferente al usual. Compartió con sus amigos esta nueva experiencia, ya con mucha más edad de cuando íbamos a los cumpleaños infantiles, y hasta se trajo lo que repartieron en la hora loca.

Al preguntarle si repetiría la experiencia, solo me miraba como preguntándose el por qué yo le decía eso, aunque al final me dijo que solo con sus amigos más cercanos.

Para mi es toda una puerta abierta a algo novedoso, sobre todo porque nunca fui a fiestas en mi adolescencia, y en la adultez solo a reuniones nada formales, así que me alegra que él haya podido vivir esa experiencia, y que yo haya sido capaz de aguantar la angustia de no saber donde estaba, aunque fuera por tan poco tiempo.

There are several milestones in motherhood that cause us fear, but when adolescence arrives, it is as if a tidal wave arrives while you are swimming peacefully, and you do not finish reacting when another milestone to overcome arrives.

In my case, the beginning of my older son's adolescence coincided with the time of the pandemic, so the change to high school, making new friends, and other situations typical of that first stage I did not live them... until now.

A couple of weeks ago, my son tells me he wants to go to the 18th birthday of one of his friends (he is the youngest of the group) and of course, the alarms went off, until he told me it would be during the day and close to home.

For some time now he has been going to meet with his friends at the house of one of them, and even stays for fun for him - and peace of mind for me - but in this case, he would be going to a party room with people I don't know and that was my fear.

The gathering was on a Sunday, from 2:00 pm to 5:00 pm, something simple for the birthday boy to share with his friends and family.

When he returned, his happy face said it all, he had an incredible time, although he doesn't know how to dance, but he was in a different environment than usual. He shared this new experience with his friends, now much older than when we used to go to the children's birthday parties, and he even brought back what they gave out at the crazy hour.

When I asked him if he would repeat the experience, he just looked at me as if wondering why I was telling him that, although in the end he said only with his closest friends.

For me it is a door open to something new, especially because I never went to parties in my adolescence, and in adulthood only to gatherings nothing formal, so I'm glad he was able to live that experience, and that I was able to endure the anguish of not knowing where I was, even if it was for such a short time.


Foto/Photo by: @mamaemigrante
Edición/Edited by @mamaemigrante using canva
Translated and formatted with Deepl



0
0
0.000
6 comments
avatar

Jajajaj se ven muy divertidos esos lentes. Dios te de paciencia con tu hijo. Saludos

0
0
0.000
avatar

Amiga a todas nos da terror Pero es parte del crecimiento de cada quien, toca confiar y saber con quién se reúnen y vigilar pero definitivamente dejarlos disfrutar, es una etapa que si se pasa jamás se recupera. Te deseo mucha suerte en este proceso amiga bella. Saludos y Bendiciones

0
0
0.000
avatar

Pues si. Mi temor es que justo a ese amigo yo no lo conozco porque no estudia con él, pero iba con los demás que si conozco. Sé que son muchachos sanos, pero igual queda el sustico por dentro.
Saludos.

0
0
0.000
avatar

A veces pienso que seré doña angustias cuando ese momento llegue. Pero es parte de la vida, confiar es lo que queda y claro estar muy pendiente.

0
0
0.000
avatar

Pues si. Sembrar en ellos buenos criterios, para que decidan solos y no guiados por un grupo.
En mi caso, sé lo que tengo en casa, pero lo que temo es desconocer sus entornos.

0
0
0.000