¿INADVERTIDA?/UNNOTICED? ( Esp/Eng)

Hola mis amigos, encantada de saludarlos. Es para mí un placer regresar a esta comunidad para compartir mis textos. En esta ocasión le traigo un pequeño cuento, espero lo disfruten.

El escogió sentarse en el fondo del aula, siempre con gafas oscuras y sin interactuar. Primero en llegar y último en irse. Yo, en la vanguardia, no por destacarme, sino por mí avanzada miopía. De vez en cuando giraba para verlo, pero nunca me miraba. ¿No sé por qué le soy ajena?. Tal vez le gusten más delgadas. ¿Tendré que hacer dieta? ¡Qué horror! Con lo que me gustan los dulces, refrescos, pizzas y todo lo que engorda. Qué va, dieta no. Si le voy a gustar tiene que ser así ¿Quién se habrá creído él que es para querer que yo baje de peso?

Hoy llegué temprano. Echado junto a la puerta descansa un perro, lo he visto otras veces ahí. Me senté al final aunque no vea la pizarra. Sigue sin mirarme a pesar de llevar puesta la blusa más escotada y el pantalón más ajustado de mi closet. Respondí la mayoría de las preguntas, acerté solo algunas, pero eso no importa, solo quería llamar su atención. Su indiferencia es irritante. Un miércoles más y todavía no he logrado nada.
Hoy, por primera vez, escuché su voz. Hizo disertaciones precisas de autores consagrados. Que calladito se lo tenía. Casi al terminar la clase recibí una llamada de la escuela que mi hijo estaba con fiebre y me tuve que ir.
Otro día sin lograr nada.
Hoy sí que no se me escapa, vine dispuesta a todo. Ya es una cuestión de honor. Me caí cerca de él para que me ayudara a incorporarme. Terminé con un esguince, un yeso en el pié y él ni se inmutó. Es un desagradable. Solo faltaba un encuentro para terminar el taller de literatura, era mi última oportunidad. Me puse un vestido ceñido y con unas muletas que me prestaron, fui para mi curso.

_Usted sí que tiene ganas de ser escritora_dijo el profesor.

Cuando terminó la clase, me volteé y lo vi sacar de su portafolio un tubo de metal plateado, lo oprimió por la parte superior y se convirtió en un bastón. Se puso de pie, avanzó sujetándose de la pared y tocó la puerta con el sofisticado artefacto. Afuera lo esperaba su perro Lazarillo. Quedé petrificada por mi nivel de despiste. Uno del grupo me cerró la boca con un dedo y dijo:

_Hoy estás más bella que de costumbre.


Contenido de mi propiedad. Imagen hecha en Canva



UNNOTICED?

Hello, my friends! It’s a pleasure to greet you again. I’m thrilled to return to this community and share my writing. This time, I bring you a short story. I hope you enjoy it.

He always chose to sit at the back of the classroom, wearing dark glasses and never interacting. First to arrive, last to leave. I sat up front, not to stand out, but because of my severe nearsightedness. Occasionally, I’d glance back at him, but he never looked my way. Why am I invisible to him? Maybe he prefers thinner girls. Should I go on a diet? Ugh, no way! I love sweets, soda, pizza—all the stuff that packs on pounds. Forget dieting! If he’s going to like me, it’ll have to be as I am. Who does he think he is, expecting me to lose weight?

Today, I arrived early. A dog lay sleeping by the door—I’d seen it there before. I sat at the back, even though I couldn’t see the board. He still didn’t look at me, despite my lowest-cut blouse and tightest jeans. I answered most of the teacher’s questions, got a few right, but it didn’t matter. I just wanted his attention. His indifference was maddening. Another Wednesday, another failure.

Then, for the first time, I heard his voice. He delivered precise analyses of classic authors. So quiet, yet so sharp. Near the end of class, I got a call that my son had a fever. I had to leave. Another day wasted.

Today, I was determined. This is about pride now. I “tripped” near him, hoping he’d help me up. Ended up with a sprained ankle, a cast, and him still ignoring me. What a jerk. The final literature workshop was my last chance. I wore a tight dress and borrowed crutches.

You really do want to be a writer the professor remarked.

After class, I turned and saw him pull a silver metal tube from his bag. He pressed the top, and it extended into a cane. He stood, gripping the wall, and tapped the door with the sleek device. Outside, his guide dog, Lazarillo, waited. I froze, stunned by my own cluelessness.
A classmate pressed a finger to my lips and whispered:

_You look more beautiful than usual today.


My original content. Image created on Canva



0
0
0.000
14 comments
avatar

¡Qué bueno leerte de nuevo! 🤩 Me intriga ese personaje misterioso al fondo del aula. ¡A ver cómo sigue la historia! 😉

0
0
0.000
avatar

🤭 Saludos. Muchas gracias por leerme. El final es abierto, 🤭cada lector que se lo imagine, al fin y al cabo, en realidad no era inadvertida. 🤪. Un abrazo 🤗😘🙏

0
0
0.000
avatar

Qué placer inmenso encuentro en leerte

0
0
0.000
avatar

Muchas gracias 😊🫂

0
0
0.000
avatar
(Edited)

A ti que nos traes tan buenas historias y contenidos para nuestro deleite

0
0
0.000