English Version

I am sure that, of all the ways to start the day in harmony, one of the best is to be by the sea. At this hour the sun is still weak and reflects on the water creating bright flashes, like little sparks of light coming off the waves.

This area is the entrance to Havana Bay, and my intention on arriving here was to enjoy the scenery. Directly opposite at the opposite end of the sea is the fortress of the Morro Castle, with its lighthouse which for a long time guided ships on their safe entry into Havana's harbour.

On both sides the Malecón stretches out. On one side, the city with its tallest buildings visible in the distance, and on the other the harbour avenue bordered by the gentle sea in the soft morning light.

But my little morning stroll also had an unexpected reward, I met a group of fishermen who, with great skill and even more patience, were waiting for the sea to give them a good catch. I had never seen the art of fishing so closely, so I spent some time watching the men cast their hooks into the water.

I didn't see any of them catch a fish at the time, but from the number of men in this small space I gather it's not a bad place to fish. I only saw a few fish hanging from the bicycle of one of them. At that moment I felt like being there among those fishermen with my fishing rod and my eyes on the blue sea.

Like me, several people passed by simply to enjoy the view, attracted by the tranquillity of the place and the scenery which is always wonderful, or just looking for a moment of calm and serenity.

At that time of the morning, although the sun is already up, the city is still quiet, it is early and just beginning to wake up, so there are few people passing by, few cars on the streets, and everything feels as if it is on pause. A moment of calm before the hustle and bustle of everyday life takes its place.

I hope you enjoyed this simple walk by the sea, best wishes to the whole Wednesday Walk community, and see you next time!

Estoy segura de que, entre todas las formas de comenzar el día en armonía, una de las mejores es estar junto al mar. A esta hora el sol aún es débil y se refleja sobre el agua creando destellos brillantes, como pequeñas chispas de luz que saliendo de las olas.

En esta zona se encuentra la entrada de la bahía habanera, y mi intención al llegar aquí fue disfrutar del paisaje. Justo al frente en el extremo opuesto del mar, se encuentra la fortaleza del Castillo del Morro, con su faro que durante mucho tiempo guió a las embarcaciones en su entrada segura al puerto de La Habana.

A ambos lados el Malecón se extiende. Por un lado, la ciudad con sus edificaciones más altas visibles en la distancia, y por el otro la avenida del puerto bordeada por el mar apacible bajo la luz suave de la mañana.

Pero mi pequeño paseo matutino tuvo además una recompensa inesperada, encontré un grupo de pescadores que con gran destreza y más paciencia aún, esperaban que el mar les regalara una buena pesca. Nunca había visto tan de cerca el arte de pescar así que pasé un buen rato observando cómo los hombres lanzaban sus anzuelos al agua.

*Aunque no vi que ninguno sacara un pez en ese momento, pero por la cantidad de hombres que había en este pequeño espacio deduzco que no es un mal lugar para pescar. Solo vi unos cuantos pescados que colgaban de la bicicleta de uno de ellos. En ese momento sentí deseos de estar ahí entre esos pescadores con mi caña de pescar y la vista en el azul del mar.

Como yo, varias personas pasaron por aquí simplemente para disfrutar del panorama, atraídas por la tranquilidad del lugar y el paisaje que siempre es maravilloso, o simplemente en busca de un momento de calma y sosiego.

A esa hora de la mañana, aunque ya ha salido el sol, la ciudad aún está tranquila, es temprano y recién comienza a despertar, por lo que hay pocas personas transitando, pocos automóviles en las calles, y todo se siente como en pausa. Un instante de calma antes de que el bullicio cotidiano tome su lugar.

Espero que hayan disfrutado este sencillo paseo junto al mar.

¡Un saludo a toda la comunidad de este Paseo de Miércoles, y hasta la próxima!