Mi entrada al Concurso TopFiveFamily Observa Piensa Escribe. Maravillas cotidianas

Creo que cuando estamos acostumbrados a cosas buenas damos por hecho que son comunes, cuando no necesariamente es así, en el transcurso de los años me he dado cuenta que lo que en mi país es normal en cuanto a los alimentos de origen vegetal o frutal, en otros lugares del mundo es un privilegio, antes inocentemente pensaba que que era un asunto meramente ambiental, pensaba como muchos que en mi país por ser tropical tenemos el privilegio de tener una gran variedad de frutas a nuestra disposición y que suelen ser bastante económicas, que incluso las que importamos son pocas y de países que son de nuestro mismo continente pero de zonas más frías, es decir entendía que el inconveniente de algunos países estacionales era poder cosechar dependiendo de la temporada del año, sin embargo, he comprendido que eso es solo un factor pero no la totalidad y que muchas veces la diferencia no es solo por el ambiente.

Gracias al Internet es posible conocer mejor las realidades de otros lugares del mundo, por lo que entendí que nuestro privilegio de tener tantas frutas no se debe tanto a la calidad de nuestra tierra o el del clima, sino a la disponibilidad de la tierra para esa actividad, mientras hay países del mundo con extensiones de tierra amplios que están poco poblados, hay otros lugares en donde hay sobrepoblación por lo que el valor de la tierra es elevado y cosechar frutos es considerado un lujo, al enterarme de esta situación entendí que no se trata de solo un problema de tener tierra, agua y clima favorable, sino que depende de problemas incluso geopolíticos, porque del este lado del mundo aun podemos ver como buena inversión la agricultura, mientras que es otros lugares no es así, además no tenemos sobrepoblación.

Lo mas cotidiano para nosotros en mi país es comer frutas, por lo que enterarme que hay países donde un jugo de naranja artificial siempre será más barato que una naranja fue algo muy impresionante, por eso aprendí a darle aun más valor al privilegio cotidiano que tenemos al ir a las ferias de frutas, verduras y hortalizas y poder comprar producto frescos, incluso algunas frutas que no se producen en el país sean traídas de países vecinos por lo que su valor no es tan elevado.