¿Alivio que viene de España? (SPA-ENG)
En las últimas horas ha trascendido una noticia de suma importancia para el ambiente futbolístico internacional, de acuerdo al anuncio de un reconocido periodista británico de nombre David Ornstein quien ha publicado en el medio especializado The Athletic que el exitoso Carlo Ancelotti deja al Real Madrid para asumir como nuevo director técnico de la selección brasileña de fútbol.
La Confederación brasileña de fútbol (CBF) confirmó un rato después de esa publicación que la noticia era cierta, el destacado entrenador de origen italiano se hará cargo de la selección mayor apenas finalice su contrato con el equipo merengue, cosa que acontecerá el próximo 25/5 cuando culmine el actual torneo del fútbol español. El Real Madrid hasta el momento no ha producido un anuncio oficial al respecto.
A pesar de esta confirmación por parte del presidente de la CBF, el público y el periodismo especializado mantienen justificadas reservas, todos recuerdan que en 2023 se anunció esta misma contratación augurando el debut del exitoso DT en la Copa América de 2024, sin embargo, fue Dorival Junior el técnico en esa competencia. Todos conocemos la fábula de Pedro y el lobo.
Como si aquella fallida noticia no fuera suficiente material como para desconfiar, también hay un gran desprestigio personal del actual presidente de la CBF Ednaldo Rodrigues quien tiene varias denuncias por desmanejos y negocios turbios incluida una muy grave como es la falsificación de la firma de Coronel Nunes un ex-vicepresidente de la confederación que posibilitó su reelección al frente de la misma hasta el año 2030.
Mientras se dirime en la justicia la validez de su segundo mandato, Rodrigues anuncia la llegada de Ancelotti como solución a los problemas futbolísticos que enfrenta la selección más ganadora en toda la historia del fútbol mundial. No podemos negar que al menos en parte, parece una estrategia pensada y ejecutada para desviar la atención pública de la incómoda situación institucional.
A todo esto, el técnico de origen italiano no tendrá mucho margen de maniobra a su favor, a diferencia de lo que ocurre en el Real Madrid, aquí deberá lidiar con diferentes inconvenientes extra futbolísticos como la ya mencionada debilidad dirigencial, los desmanejos y los problemas judiciales entre otros.
Respecto a la actividad estrictamente deportiva al frente de la selección, no son pocos ni livianos los problemas que se le presentan. Según trascendió, el 26/5 ya estará en Brasil y será presentado a las autoridades de la CBF para pasar inmediatamente a la convocatoria de los jugadores para hacer frente a la doble fecha del 5/6 ante Ecuador en Guayaquil y del 10/6 contra Paraguay de local, escaso tiempo como para promover cambios tácticos y de jugadores que puedan mejorar sensiblemente un conjunto que no está funcionando de la mejor manera.
Pensando en el futuro inmediato, otro gran desafío enfrentará el nuevo técnico, solo contará con unas 10 o 12 convocatorias de jugadores para los encuentros por la clasificación sudamericana y algunos pocos amistoso antes del mundial de 2026 que ya está a la vuelta de la esquina, expresión que utilizo para graficar el poco tiempo que resta hasta el comienzo de la próxima cita mundialista.
Según entendemos, el problema no es de nombres, todos conocemos que figuras brasileñas sobran en el concierto del fútbol mundial, el mayor inconveniente radica en el bajo rendimiento que demuestran muchos jugadores de elite que se desempeñan de gran manera en Europa pero que tienen una paupérrima performance cuando se visten con la verdeamarela, Raphinha, Vinicius Junior, Alisson y Rodrygo son algunos ejemplos concretos. Muchos opinan que el problema quizás sea más una cuestión táctica, una falla colectiva y no individual, ese es un inconveniente que el nuevo DT deberá tratar de solucionar pronto.
Por otra parte, no son pocas las voces que se escuchan de especialistas, técnicos y ex-futbolistas que afirman que el mayor problema del fútbol brasileño es una generación de jugadores de escaso vuelo, inexpresiva, más acostumbrada al dinero, a la exposición mediática y a la comodidad de sus clubes de elite que a dejar la piel por la camiseta nacional.
Todos conocemos la valía de Carlo Ancelotti como DT, sin embargo, las dudas florecen cuando se analiza el panorama completo: es una realidad que se deberá desempeñar y mostrar resultados rápidamente dentro del ambiente más complejo, caótico y desordenado que ha enfrentado en toda su carrera, asimismo, deberá lidiar con la idea de que es un técnico extranjero para nada identificado con el fútbol brasileño; por esta última condición dispondrá de escaso tiempo de adaptación hasta que comiencen las más despiadadas críticas.
De hecho, ya tenemos las primeras repercusiones contrarias a Ancelotti y nada menos que de parte del presidente de la república quien mencionó desde China donde se encuentra en visita protocolar, que no tiene nada contra los técnicos extranjeros pero que en Brasil hay varios DT capacitados como para hacerse cargo de la selección nacional. Además, Lula Da Silva sugirió que sería una buena medida formar la selección con jugadores que se desempeñan en el fútbol local dejando de lado a los que juegan en Europa que no han sabido rendir en la medida de sus antecedentes.
Las críticas y la presión comienzan a sentirse y ni siquiera se ha hecho cargo del equipo, de seguir por esta senda no habrá Ancelotti que valga.
Relief coming from Spain?
In recent hours, extremely important news has emerged for the international football world. According to an announcement by renowned British journalist David Ornstein, published in the specialized media outlet The Athletic, successful coach Carlo Ancelotti is leaving Real Madrid to take over as the new technical director of the Brazilian national team.
The Brazilian Football Confederation (CBF) confirmed shortly after this publication that the news was true: the prominent Italian-born coach will take over the senior team as soon as his contract with the Merengue team expires, which will happen on May 25th, when the current Spanish football tournament concludes. Real Madrid has not yet made an official announcement on the matter.
Despite this confirmation by the president of the CBF, the public and specialized journalists maintain justifiable reservations. Everyone remembers that this hiring was announced in 2023, predicting the successful coach's debut in the 2024 Copa América. However, Dorival Junior was the coach in that competition. We all know the story of Peter and the wolf.
As if that failed news story weren't enough to raise suspicions, there's also significant personal discrediting of the current CBF president, Ednaldo Rodrigues, who has faced several accusations of mismanagement and shady dealings, including a very serious one: the forgery of the signature of Coronel Nunes, a former vice president of the confederation, which enabled his reelection to head the organization until 2030.
While the validity of his second term is being questioned in court, Rodrigues announces the arrival of Ancelotti as a solution to the football problems facing the most successful team in the history of world football. We can't deny that, at least in part, it seems like a strategy designed and executed to divert public attention from the awkward institutional situation.
In all of this, the successful coach won't have much room for maneuver, unlike at Real Madrid. Here, he'll have to deal with various non-football issues, such as the aforementioned weak leadership, mismanagement, and legal issues, among others.
Regarding his strictly sporting activities as head coach of the national team, the problems he faces are not few or minor. According to reports, he will be in Brazil on May 26 and will be presented to the CBF authorities to immediately be called up for the double date of the June 5th match against Ecuador in Guayaquil and the June 10th match against Paraguay at home. This is not enough time to make tactical and player changes that could significantly improve a team that isn't performing at its best.
Looking to the immediate future, the new coach will face another major challenge. He will only have 10 or 12 players to call up for the South American qualifying matches and a few friendlies before the 2026 World Cup, which is already right around the corner. This expression I use to illustrate the short time remaining until the next tournament begins.
As far as we understand, the problem isn't one of names. We all know that Brazilian figures are abundant in the world of football. The biggest problem lies in the poor performance of many elite players who perform brilliantly in Europe but have a very poor showing when they don the green and yellow jersey. Raphinha, Vinicius Junior, Alisson, and Rodrygo are some concrete examples. Many believe the problem may be more of a tactical issue, a collective failure rather than an individual one. This is a problem the new coach must try to solve soon.
On the other hand, there are many voices heard from specialists, coaches, and former players who claim that the biggest problem in Brazilian football is a generation of players who are unprepared, inexpressive, and more accustomed to money, media exposure, and the comfort of their elite clubs than to giving their all for the national team.
We all know Carlo Ancelotti's worth as a manager, but doubts arise when analyzing the bigger picture: he must perform and deliver results quickly within the most complex, chaotic, and disorderly environment he has faced in his entire career. He must also deal with the idea that he is a foreign coach who has no ties to Brazilian football. Because of this last condition, he will have little time to adapt until the most vicious criticism begins.
We're already seeing the first repercussions against Ancelotti, and none other than the president of the republic, who mentioned from China, where he's on a protocol visit, that he has nothing against foreign coaches, but that there are several coaches in Brazil capable of taking charge of the national team. Furthermore, Lula da Silva suggested that it would be a good idea to form the national team with players who play in local football, leaving aside those who play in Europe and haven't been able to perform to the best of their abilities.
The criticism and pressure are beginning to be felt, and he hasn't even taken charge of the team. If he continues down this path, there won't be any Ancelotti worth his salt.
Héctor Gugliermo
@hosgug
Es un tema que va para largo, lo que menciona del presidente de la confederación Brasileña es verdad, nada mejor que traer a un italiano, les de en el orgullo a la gente, y las personas empiecen a hablar y desviar la atención.
Pero pasa también, que en Brasil ya los técnicos consagrados están viejos y no hay generacion de relevo, la generación de los años 90' no emprendió en el viaje para ser técnico, creo que solamente Dunga, y ahí también es parte del problema.
Lo de competir solamente con lo nacional, es viable, pero no sé que tan bueno será, lo digo para los que están jugando en el extranjero, sería una forma para que dejen un poco la farándula.
Por otro lado, lo del tiempo es algo que es muy cierto, pero como Brasil últimamente no ha jugado a nada, y Ancelotti tampoco es que juegue muy bonito que digamos, ambas realidades de juntan, y creo si van a pegar, porque con Ancelotti no van a jugar al jogo bonito nunca.
La edad también interviene, ellos hablan del camino a la 6ta y hablan del 2030 también, y creo el hombre no llega hasta allá. Lo de Ancelotti es para el 2026, y si, yo creo tiene posibilidad, ojo con Brasil, que así es cuando es más peligroso. Ya han pasado 24 años desde esa noche mágica en Tokio en 2002, ya creo les toca.
Si, un gran análisis de tu parte, Ancelotti ya tiene 65 años y para el 2030 seguramente estará retirado y disfrutando de su merecida vida acomodada.
Respecto al jogo bonito también has dado en la diana, lo iba a incluir en mi publicación pero ya se estaba haciendo demasiado larga. Algunas críticas se escuchan sobre ese tema, ¿Brasil abandonará esa modalidad de juego que lo hizo tan famoso y ganador?
Saludos @epirela22, gracias por aportar mucho más a mi publicación.
Muy poco que agregar a su escrito estimado @hosgug, como no sea que otros pesos pesados como Cafú se ha pronunciado como lo hizo el presidente brasileño.
Si considero que esta generación de jugadores de Brasil cambian, para mal, cuando se ponen la camiseta verde amarilla.
Coincido con @epirela22 y con Ancelotti no habrá identidad de juego bonito ni nada por el estilo. Pero, es la decisión de ellos.
Lo que sí me parece improbable que en tan poco tiempo y con toda la andanada de críticas que le caerán pueda revertir una situación que es mucho más compleja que traer a un técnico extranjero a dirigir esa selección.
Gracias por compartir.
Feliz jornada.
Salud y saludos
El tema del entrenador de Brasil me hace recordar a la de Países Bajos (Holanda); ambos países tienen buenos jugadores, pero entrenadores oarece que muy pocos y eso se nota cuando las selecciones no ofecen un buen juego a pesar de contar con buenos jugadores, lo otro es que los últimos entrenadores de Brasil son personalidades locales, poco roce internacional y eso no es la solución y para colmo, si eterno rival futbolístico, sigue ganando y es nuevamente favorito para ganar el mundial; todo eso les ha empujado por fichar a un exitoso entrenador que está última temporada se ha desgastado en un club ganador y lo cual creó que es una gran oportunidad cambiar radicalmente y llegar a la selección que es la máxima ganadora de mundiales; no es un reto fácil,pero creo que será divertido que hace Ancelotti con la selección canarinha.