No soy sabio, ni soy al que más cosas le han sucedido( aunque unas cuantas si), ni es cuestión de quejarse o no. Es un poco más profundo que eso, es un poco más complejo y a la vez más sencillo.

Me gusta reflexionar sobre la vida, reflexionar en silencio en debates conmigo mismo y mis opiniones o percepciones divididas. Luego también me gusta reflexionar en voz alta , de una manera más espontánea e instintiva por llamarlo de alguna manera, y además compartirlo con mi entornono. Eso significa que mis reflexiones sean siempre acertadas o que alguna vez lo sean, solo son mías, muy mías porque nacieron aquí pero no tienen derecho de autor, no merecen créditos por utilización exitosa o descredito por resultados fallidos.

Lo que si es cierto es que algunos añitos he vivido ya y como el de la mayoría de las personas, mi camino ha tenido y aún tiene bastantes piedras con que tropezar.

Porque si algo abunda en los caminos que transitamos es eso, piedras, de todos tipos y tamaños, suficientes piedras para todos tropezar cuanto queramos e incluso muchas que se las ingenian para estar en varios caminos diferentes al mismo tiempo.

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Dentro de la piedra.

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_{-Iqmgen de Mattia Bericchia, Unsplash-}
¿Conocen las galletas de la fortuna?

Si, esas que traen breves y bonitos mensajes optimistas y motivadores dentro escritos en un pequeño papelito.

Pues cada piedra con que tropezamos también lleva un mensaje dentro, uno que no es bonito, ni está escrito en un papelito, pero que es real, claro y útil si se sabe leer detenida, atenta y correctamente, uno que siempre está allí ,dentro de la piedra, pero que no siempre somos capaces de ver, de leer o de entender, una enseñanza de vida que si no logramos aprender en el primer tropiezo, retorna nuevamente más adelante a nuestro camino, como el búmeran lanzado a lo lejos, pero está vez regresa dentro de una piedra más grande con la que tropezarmos más fuerte y que es portadora del mismo mensaje pero mucho más directo, contundente y profundo, para que está vez lo podamos descifrar y entender de una buena vez.

Creo que lo comenté alguna vez en un post anterior. Tengo la creencia de que de los tropiezos y errores se aprende de una forma única que se adhiere y se arraiga en nuestro conocimiento para toda la vida.

Cuando se tropieza con esa piedra y logramos entender el mensaje, normalmente lo que aprendemos en ese momento no se olvida jamás, se convierte en un código propio que se aplica en todo momento, quizás como recordatorio del error mediante el cual adquirimos el conocimiento profundo y que garantizará que esa piedra nunca más se cruce en tú camino.

¿Que hago con mis piedras?

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Bueno, no me gusta cargarlas porque considero que es un peso innecesario, pero tampoco creo que botarlas así sin más sea correcto. Es por eso que intento antes de quitarlas del camino, extraer el mensaje que traen (que por cierto, es como las uñas porque vuelve a crecer dentro de ella para el próximo tropiezo de alguien) y apropiarme de el para evitar un futuro tropiezo similar y además para poder reproducirlo en forma de experiencia o consejo del que alguien pudiera aprender sin tener que llegar a tropezar.

Sin embargo, tropezar es inevitable para todos, siempre lo hacemos y ,siempre lo haremos, pero lo que si podemos evitar es tropezar innecesariamente. Es por eso que existen otras vías de aprendizaje, verdaderamente no podemos aprenderlo todo mediante golpes de la vida porque llegaría el momento en que no tendríamos capacidad o integridad física para aplicar lo aprendido.

Esos mensajes que retengo se van acumulando ahí dentro de mi mente, a veces olvido que están ahí, descansando, pero activos, siempre retornan cuando son necesarios, ya sea para evitarme un tropiezo o para ser compartido con otros en forma de experiencia o de consejo, quizás en este rol, también puedan evitar un golpe innecesario.

_{-Imagen de Rosner Hyman, Unsplash}

Siempre me ha gustado efectuar aportes a las nuevas generaciones que se cruzan en mi camino, aunque se dice aquí que "nadie escarmienta por cabeza ajena". Pero igual me gusta aconsejar a quien lo necesita, incluso si no me lo pide, me gusta compartir lo que mis experiencias me han enseñado, los conocimientos que mis tropiezos han dejado guardados.

Y es solo eso lo que comparto aquí con ustedes, algún que otro de esos mensajes que, a veces, en medio de mi reflexión retrospectiva sale a flote y creo que vale la pena compartir en esta comunidad que me dió el espacio para llenar de piedras metaforicas pero contentivas de mensajes.

_{-Imagen de Sergiu Vălenaș, Unsplash-}

Creo que si cada familia, recogiera en libros familiares( como una especie de diario) los errores y tropiezos de la vida de cada generación, las enseñanzas que dejaron y las reflexiones que generaron, el mismo se convertiría en el mayor tesoro familiar al pasar de los años y a su vez la mayor fuente de conocimiento que estaría además en continuo crecimiento, enriquecimiento y perfeccionamiento al transferirse de generación en generación.

Les repito, mi blog, o al menos los posts de mi blog que dedico a esta comunidad donde encontré un maravilloso espacio para compartir y almacenar mis experiencias de vida y reflexiones, son solo eso... páginas de un libro familiar, que pueden ser páginas a su vez de tu libro familiar sinoo deseas y que recogen sucesos, pensamientos, tropiezos, experiencias y mensajes que pudieran ser útiles algún día al ser leídos, que quizás podrían ser fuente de enseñanza, motivo de reflexión o sencillamente convertirse en un mapa para que a aquel que por casualidad transite caminos similares y se sienta perdido o desorientado, encuentre en ellos una brújula que le pueda servir de guía sin tener, al menos mientras no sea necesario, que buscar...dentro de la piedra.