Siempre he sido un poco solitaria, hubo un tiempo en el que vivía rodeada de amigos, cuando la fiesta estaba encendida, y todo era alegría, definitivamente las amistades abundaban, sin embargo, cuando las cosas no han sido tan positivas, he podido contar a los verdaderos amigos con una mano y me sobran muchos dedos; ayer recibí la grata visita de uno de los que hasta la fecha, considero, de mis mejores y verdaderos amigos, ese que me ha hecho reír hasta llorar, ha secado mis lágrimas, me ha dado ánimos cuando pensaba que todo estaba perdido, y que aún, cuando pasamos años sin vernos, continuamos teniendo esa complicidad y ese ánimo de hacernos bullying sin ofendernos, el cariño continúa intacto, y eso para mí es algo que valoro inmensamente.



Pablo, La Perra Esa, era el mejor amigo de un antiguo novio que tuve hace unos 17 años, y que termino diciéndome de manera cariñosa (aunque muchos pensaran lo contrario), La Perra Esa, pues siempre que llamaba a mi exnovio, estaba conmigo haciendo cualquier actividad, y por momentos me comentaba que se sentía desplazado, pues su amigo lo había hecho a un lado por mí; para cuando rompí con aquel novio, mi sorpresa fue gigante, cuando era el quién me consolaba en medio del despecho, durante largo tiempo quiso hacer de cupido e intentar encuentros entre mi ex y yo para que nuestro grupo de amigos no se terminara disolviendo, pero eso no se logró, sin embargo, en la repartición de bienes de la relación, me quede con el tesoro más preciado, la hermosa amistad que este ser tan ocurrente me ha podido brindar.



Como les comentaba, ayer vino de visita con su esposa, y madre de sus dos hermosas hijas, estuvimos conversando un poco para actualizarnos, pues no nos veíamos desde hace unos 4 años, vivimos a unos 20 minutos de distancia, pero, la rutina diaria del trabajo y las familias no nos dejan coincidir como solíamos hacerlo antes, por aquellos años fiesteros, nos veíamos casi a diario, lo cual hizo que ambos nos sintiéramos como familia, mis padres y hermanos lo reciben como uno más de la casa, y es que, así lo vemos en casa.


_{En esta imagen se ve como los años no han pasado en vano, y aunque son más los años de amistad, deseo que continúen añadiéndose más a la lista}

Cuando ya se iba nos tomamos una foto, no podía dejar pasar la oportunidad de decirle que está lleno de canas y dejarlo documentado jajaja, él siempre se burla de que yo soy mayor que él, al publicar la gráfica en mis estados de WhatsApp, aparecieron algunos viejos compañeros de trabajo que también formaron parte de aquel grupo fiestero que nos acompañaba, algunos sugiriendo que deberíamos reunirnos nuevamente, y la verdad es que, me provoca un poco propiciar una reunión, pero, como lo dije líneas arriba, coincidir ahora, es algo que cuesta un poco, pues las rutinas de todos han cambiado, y obviamente las responsabilidades de todos son aún más importantes que tomarse unos tragos con viejos amigos.

_{Imágenes de mi propiedad, tomadas con la cámara de mi teléfono Redmi Note 14, editadas con Snapseed.}

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