Discipline routine - a one-day columnist initiative / Rutina de disciplina - iniciativa de columnista por un día (eng-esp)

Hello, friends of Holos & Lotus.

@maylink, as always, has given me a great topic to discuss with you today: a recurring theme in guitar lessons and in art in general: discipline. You might not think that I'm responding directly to what Mailin asked for in her "guest columnist for a day" initiative, but I am. Read until the end.

When we hear great guitar masters talk, they tell us that they study every day, between four and six hours a day. Each of them has their own schedule and routine, established over the years. But their entire routine revolves around the guitar, around their practice. Even their practice has its own routine. I know a great guitarist who says that, as part of his routine, he always starts his practice with a warm-up for his fingers, and then, also as a warm-up, he plays Heitor Villa-Lobos's Study No. 1 several times. This is something I tell my students when I notice them lacking focus. They are very talented, like my children, and have great potential for the guitar. But, as my teacher says, talent alone isn't enough. Sometimes it's better to have a student who is hardworking, studious, and disciplined than one who is talented but doesn't put in the effort. The former will go much further. And as for discipline, every student, every professional, must have a routine that revolves around the guitar. If the great masters do it, even after achieving success and establishing a name for themselves in the international music world, how can we not do the same?

My routine is divided between my children and the guitar. I dedicate the mornings to preparing them for school. Once the kids are at school, I have time to study, at least an hour. Then come my household chores or professional obligations. Every night I review my agenda (yes, I had to get a planner so I wouldn't forget anything) and plan for the next day. I think this is very important for staying organized. At noon, I always go to the school to teach my students. Here I also have my own little routines, so to speak. As a teacher, I don't just teach them how to play the guitar. The first thing I do is ask them how they are. I care about them as people and I pay close attention to them. Then, I continue with the lesson.

This teaching schedule can change depending on my performance schedule as a musician. There are days when I perform in several places, either during the day or in the evening. That can alter my routine. But the core of it never changes. At some point in the afternoon or evening, after preparing a snack for my children when they come home from school and preparing dinner, I study again.

Something that has become part of my routine is #hive. Whether it's in the morning or at night. Especially in the evenings, I have to sit down and write my post for the following day. In the mornings, what I do most is read and interact with the community.

This is a new addition to my daily routine. That's why I need a planner, friends, so I can incorporate these daily tasks into my usual routine and stay organized. Otherwise, I tend to neglect some things. However, these tasks I've described here are never omitted. That's my core routine. It can be modified somewhat, but it can't be eliminated. As they say, discipline is key, and without a set routine, there's no discipline at all.

Or ask @neuropoeta and @roswelborges, whom I invite to participate in this initiative.

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Versión en español

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Hola, amigos de Holos & Lotus.

@maylink, como siempre, muy atinada me da pie a conversar con ustedes de un tema recurrente en las clases de guitarra y de arte en general: la disciplina. Quizás no les parecerá que respondo exactamente a lo que pide Mailin en su iniciativa como columnista por un día, pero sí lo es. Lean hasta el final.

Cuando escuchamos hablar a grandes Maestros de la guitarra, nos dicen que estudian todos los días, entre cuatro y seis horas diarias. Cada uno de ellos tiene su horario y su rutina establecida a través de los años. Pero toda su rutina gira en torno a la guitarra, a su estudio. Incluso, el estudio lleva su propia rutina. Conozco a un gran guitarrista que dice que como rutina siempre comienza el estudio con un calentamiento de las manos y luego, también como calentamiento, toca varias veces el estudio #1 de Heitor Villa-Lobos. Esto es algo que les digo a mis estudiantes cuando los noto dispersos. Ellos son muy talentosos, como mis hijos lo son y con grandes condiciones para la guitarra. Pero, como dice mi Maestro, no basta solo con talento. En ocasiones es preferible tener a un alumno esforzado, estudioso y con una gran disciplina que a uno con talento que no se esfuerce. Llegará más lejos el primero. Y como disciplina, todo estudiante, todo profesional debe tener una rutina que gire en torno a la guitarra. Si los grandes maestros lo hacen, incluso después de haber triunfado y haberse creado de un nombre en el mundo de la música internacional, ¿cómo nosotros no vamos a hacerlo?

Mi rutina está compartida entre mis hijos y la guitarra. Las mañanas se las dedico a prepararlos para la escuela. Ya con los muchachos en la escuela, tengo tiempo para estudiar, al menos, una hora. Luego vienen las obligaciones de la casa o las profesionales. Cada noche reviso mi agenda (sí, tuve que conseguir una agenda para no olvidarme de nada) y planifico el día siguiente. Creo que esto es muy importante para poder organizarme. Al mediodía siempre voy a la escuela de impartirles las clases a mis alumnos. Aquí también tengo mis subrutinas, para decirle de algún modo. Como maestra no solo me dedico a enseñarles a tocar la guitarra. Lo primero que hago es preguntarles cómo están. Me preocupo por ellos como personas y estoy muy atenta de ellos. Luego, continúo con la clase.

Este horario de clases puede cambiar en dependencia de la programación que tenga como concertista. Hay días que me presento en varios lugares, puede ser por el día o por la tarde. Eso puede modificar mi rutina. Pero la esencia nunca cambia. En algún momento de la tarde o la noche, luego de prepararle una merienda a mis hijos cuando llegan de la escuela y preparar la comida, vuelvo a estudiar otra vez.

Algo que se me ha incorporado a la rutina, es precisamente #hive. Ya sea por la mañana o por la noche. Sobre todo por las noches, me tengo que sentar a escribir mi post del día siguiente. Por las mañanas, lo que más hago es leer e interactuar en las comunidades.

Esto es una nueva incorporación a mi rutina diaria. Por eso necesito una agenda, amigos, para poder incorporar las tareas diarias a mis tareas habituales y así poder organizarme. De lo contrario, dejo de hacer algunas cosas. No obstante, estas que describo aquí, nunca faltan. Esa es mi rutina central. Puede ser modificada un poco, pero no eliminada. Como decían los maestros, hay que tener disciplina, y sin una rutina establecida, no hay disciplina que valga.

O si no, que me lo digan @neuropoeta y @roswelborges, a los que invito a participar en la iniciativa.