A journey through time: discovering the Cienfuegos Provincial Historical Museum // Un viaje a través del tiempo: descubriendo el Museo Histórico Provincial de Cienfuegos (Eng-Esp)

Hello, friends from #worldmappin. Today, I want to invite you to join me on a journey through a cultural institution that holds part of the history, heritage, and identity of the city where I was born. Its name: Provincial Museum of Cienfuegos.

A neoclassical-style building constructed in 1893, which was formerly the Spanish Casino of the city.

As we enter, a majestic noble staircase awaits us, which we will climb, but first, let’s explore the ground floor of the building, where we find this beautiful piece with stunning details that I couldn’t help but admire.

Upon entering the first room, I was amazed by the period furniture and the symmetry between the chandelier and the fascinating centerpiece. Both look spectacular, and next to them, this piece of furniture displays porcelain and biscuit figurines.

Walking toward the second room, I immerse myself in the essence of those who first inhabited these lands. I observe petaloid axes, stone knives, beautiful naturally formed necklaces, and, to my surprise, the immortal presence of one of those ancient inhabitants.

But my fascination doesn’t stop there as I come across a grand piano and two gigantic musical staffs that invite us to enjoy music or even create it ourselves.

I couldn’t help but admire this antique barrel troll or music box.

Now, I invite you to discover, in this cultivation of the soul, the second floor. But first, let’s enjoy the museum’s courtyard, where we find the Peacock Gate, in Art Nouveau style, which once belonged to the islander (Canarian) Don Facundo Ramírez and was part of the entrance to his family villa.

In the courtyard, I also enjoyed this plant and the intricate details of the column where it rests.

Leaving the courtyard, I was pleasantly surprised to discover that several sculptures guard the staircase.

As I climb to the next floor, a large mirror continues to showcase the skill of the artisans and carpenters who lived in this city, and my eyes can’t escape the details of the vases and the clock motifs that remind me I live in a city surrounded by the sea.

In the temporary art gallery, I couldn’t take my eyes off the ceiling, where several murals and other chandeliers coexist, along with large windows built to let the breeze refresh the rooms in such a warm climate, while the stained glass allows light to pour in.

Here, I was able to feel the presence of various works of art.

Later, the path leads us to another history room, where different tools and technologies from various eras are displayed, as well as other elements that remind us that, unfortunately, at some point in history, the slave trade existed.

They, despite being forcibly brought to these lands, carried with them their cultures and customs, which are now an integral part of our identity.

Later, I was able to admire the view of the city center from the balconies surrounding the building. Before my eyes stood palaces, houses, theaters, and other buildings constructed at different times, revealing the splendor and flourishing of an era.

On my way back, I bid farewell to the museum while enjoying, in the exit hallway, these pieces of furniture and their details.

I hope you have rejoiced with me in this beautiful journey, as I sit here savoring a coffee and reminiscing about everything I was able to discover during this tour—a spiritual growth experience for all of us.

Hola, amigos de #worldmappin. Hoy quiero invitarlos a que me acompañen en este viaje por una institución cultural que guarda parte de la historia, el patrimonio y la identidad de la ciudad donde nací. Su nombre: Museo Provincial de Cienfuegos.

Un edificio de estilo neoclásico construido en 1893 que anteriormente fue el Casino Español de la ciudad.

Al entrar, nos espera majestuosamente una escalera señorial por la cual subiremos, pero antes descubramos la primera planta del edificio, donde encontramos esta hermosa pieza con bellos detalles que no pude dejar de admirar.

Al entrar a la primera sala, quedé sorprendido por los muebles de época y la simetría entre la lámpara de araña y el fascinante centro de mesa. Ambos lucen espectaculares, y a su costado, este mueble donde aguardan figuras de porcelana y biscuit.

Caminando hacia la segunda sala, me adentro en el olor de los primeros que habitaron estas tierras y observo hachas petaloides, cuchillos de piedra, hermosos collares conformados de forma natural, y, para mi sorpresa, la presencia inmortal de uno de aquellos habitantes.

Pero mi fascinación no se detiene en este proceso de crecimiento cultural al encontrarme con un piano de cola y dos gigantescos pentagramas que nos invitan a disfrutar de la música o incluso crearla nosotros mismos.

No pude dejar de admirar este baker troll o caja de música tan antigua.

Ahora los invito a descubrir, en este cultivo del alma, la segunda planta. Pero antes disfrutemos del patio del museo, donde se encuentra el Portón de los Pavos Reales, de estilo Art Nouveau, que perteneciera al isleño (canario) don Facundo Ramírez y que formaba parte del acceso a su villa familiar.

También en el patio pude recrearme con esta planta y los detalles de la columna donde ella descansa.

Saliendo del patio, como una grata sorpresa, descubrí que varias esculturas custodian la escalera.

Mientras subo hacia la otra planta, un enorme espejo nos sigue demostrando la calidad de los artesanos y carpinteros que vivieron en esta ciudad, y mis ojos no pueden escapar de los detalles de los búcaros y el reloj con motivos que me hacen recordar que vivo en una ciudad rodeada por el mar.

En la sala de arte transitoria no he podido quitar los ojos del techo, donde conviven varios murales y otras lámparas de araña, además de los amplios ventanales construidos para que la brisa refresque las habitaciones en un clima tan cálido, mientras los vitrales permiten la entrada de la luz.

Aquí he podido sentir la presencia de varias obras de arte.

Luego, el camino nos lleva a otra sala de historia, donde se muestran diferentes utensilios y tecnologías de varias épocas, así como otros elementos que nos recuerdan que, lamentablemente, en algún momento de la historia existió la trata de esclavos.

Ellos, a pesar de haber venido forzosamente a estas tierras, trajeron consigo sus culturas y costumbres, que actualmente forman parte de nuestra identidad.

Luego he podido admirar el paisaje del centro de la ciudad desde los balcones que rodean el edificio. Ante mis ojos se muestran palacios, casas, teatros y otras edificaciones construidas en diferentes momentos, pero que revelan el esplendor y florecimiento de una época.

Ya de regreso, me despido del museo disfrutando, en el pasillo de salida, de estos muebles y sus detalles.

Espero que se hayan regocijado junto conmigo de este hermoso pasaje, mientras sentado disfruto de un café y rememoro todo lo que pude conocer en el recorrido como parte de un crecimiento espiritual para todos.

_{Este post es libre de IA.
Las fotos fueron tomadas desde mi teléfono.}

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The photos were taken from my phone.}